La Junta arranca la 'solución intermodal' sobre una acera para comunicar las estaciones de autobuses y tren en León

Acera y actual aparcamiento sobre la que irá la pérgola peatonal, con la estación de autobús al fondo.

Carlos J. Domínguez

Ha tenido que transcurrir casi medio año después de anunciarse su adjudicación oficial para que la Consejería de Movilidad de la Junta de Castilla y León anuncie ahora el arranque de las obras del proyecto que denomina de intermodalidad entre las estaciones de autobuses y de tren en León, que no deja de ser un recorrido peatonal sobre la actual acera con una larga marquesina para que los viajeros puedan discurrir por los 350 metros que separan los accesos de una y otra.

La obra será ejecutada por la unión temporal de empresas (UTE) de las empresas constructoras leonesas Geoxa y Presa Ibáñez, habituales de la obra pública en la ciudad, y el coste, ya anunciado en su día por la Junta, es de 612.471 euros, cofinanciados con subvenciones europeas.

Los trabajos, que todavía no se aprecian en la zona, fueron defendidos en su día por la Consejería como la más factible y útil, como respuesta a las muchas críticas recibidas al conocerse los primeros detalles del proyecto diseñado, y lamentando que ni el Ayuntamiento de León ni la empresa pública ferroviaria Adif hicieran alguna propuesta diferente.

Sin embargo, estas obras ahora arrancan sin que Adif haya dado respuesta pública alguna al ambicioso y sorprendente proyecto presentado a pocos días de las elecciones municipales de mayo del año pasado por el candidato y alcalde José Antonio Díez, un complejo de hasta 35 millones de inversión con una intermodalidad totalmente cubierta a la que se uniría un amplio aparcamiento subterráneo, un hotel de cuatro estrellas e incluso un intercambiador de autobuses con el alfoz de la ciudad. Diez había manifestado públicamente antes de este proyecto estrella que él hizo suyo que la tildada como algunos como “chapuza intermodal”, la que ahora se va a construir, “no le gusta a ningún leonés y menos al Ayuntamiento, pero algo habrá que hacer”.

Polémicas aparte, será esta la solución de unión de ambas estaciones que se ejecutará a partir de ahora. La Consejería la sigue defendiendo como la mejor alternativa para “adaptar el servicio al viajero a los tiempos actuales, así como mejorar el tránsito entre las dos estaciones”, con un “recorrido accesible, cubierto y confortable” y con “facilidad de identificación del tránsito intermodal e información al viajero durante el recorrido”.

El planteamiento se ejecutará sobre la actual acera de las calles San Cristóbal y Sancho El Gordo en la confluencia con Sáenz de Miera en la estación de autobuses y la avenida de Palencia en la de tren, retirando las actuales farolas pero sin tocar un metro del aparcamiento en superficie privado y de pago, aunque sí eliminando el actual aparcamiento en la zona, ya muy escaso antes de este proyecto.

Se planea una nueva pavimentación de la acera con un pavimento 'silencioso', que evite el ruido del traqueteo de los equipajes rodantes como en la actualidad, y separándose la acera de la zona de carretera con una marquesina de panel 'sándwich' metálico, que se apoyará en unos semipórticos de perfilería de acero laminado, con luces tipo LED con control lumínico. Para lograr una identificación clara que marque la transición de una terminal a otra, continúan explicando, se plantea la instalación de señalización estática desde el interior de las terminales que indique claramente el recorrido a realizar entre ellas y que nadie se pierda en el trayecto.

Una estación 'nueva' y proyectos con muchos matices

La 'intermodalidad' llega dos meses después de la inauguración de la reforma de la propia estación de autobuses de León por parte de la Junta, el pasado mes de diciembre, con un presupuesto que siempre cifran oficialmente en 15 millones de euros pero que se obra como tal no alcanzaron los 7 millones, siendo el resto el coste de la gestión de los próximos 20 años por parte de la empresa pública de la Junta Somacyl.

En la nueva estación, bautizada oficialmente como Reina Doña Urraca I de León, deben instalarse aún los prometidos centros de control por un lado de la empresa Alsa, más inminente pero que no deja de ser un simple traslado de oficinas que ya estaban en un barrio de la ciudad de León, y por el de coordinación de todos los transportes autonómicos de la Junta, para lo que se prometieron públicamente 25 millones pero que al final serán realmente apenas 2,3 millones.

Etiquetas
stats