El timo del Hullero
Un trenecillo cuyos rieles está a punto de ser la marca muerta, de un pasado en ruedas de servicios y arrastres, reminiscencia, en plan provincial leonés al menos, de aquél de barraca y feria, diablo con escoba en ristre y público. ¡¡¡Pasen y lean, señoras y señores invitados están!!!
Los políticos que se dicen de León, de modo especial los que en las distintas administraciones: local, autonómica o estatal, tienen escaño oficial por votos, tomando lo de Feve como arma arrojadiza, se lo lanzaron (y siguen) unos a otros, como “su mejor método” para decir que hacen algo por León, y lo suyo es deshacer; dentro de su proceder continuo, que es marginar.
Tengo que hablar de modo especial de Ángel Villalba, ya en la reserva, porque recientemente ha salido, de modo especial en un medio leonés, a aclarar su paso por Feve como director. Y me parece oportuno hacerlo, pues aunque siempre ha estado en el lote de políticos que nos han ido llevando al redil autonómico que no queríamos, no sé bien por qué he creído ver, en lo personal, en lo profesional, una estampa menos agobiadora. ¡Es posible!
Mucho tiempo atrás unos amigo me hablaron de él, de su fase de profesor en La Robla. Desde ahí, interpretando sencillez en su proceder político local inicial llegue a discrepar abiertamente de su dedicación en el ente autonómico con cargo político, y con carga para lo leonés, que no supo respetar. Pero siendo esto algo repetido en los de una mano y otra, para el amarre de León a un ente que no deseábamos…quedaba como uno más en el montón.
En tres V iniciales, que no son de victoria, allá cuando mi defensa máxima era por la identidad leonesa, malbaratada en el ente, pergeñé un artículo de opinión titulado 'Villalar, Villalba y el vilipendio identitario', me mostré por ejemplo así: “En un mar de dudas nos ha introducido el señor Villalba, jefe de los socialistas autonómicos, con su ”apuesta por Villalar de los Comuneros como referencia de identidad regional“. El señor Villalba no se entera que los leoneses no queremos ser castellanos y que, a la recíproca, lo castellanos tampoco quieren ser leoneses. Del mismo modo que, ambos pueblos, no han asimilado, ni para andar por casa, el invento político fusionador castellanoleonés. Sin olvidar la incorrecta expresión de regional por autonómica.”
Tres apuntes de su aparente virtuosismo político autonómico, abren el abanico, siempre llevando a León cuesta abajo o soportando cargas que no le correspondían, como autonomista acérrimo y afincado en el ente centralista. En 2005 abogaba por la ejecución de la línea eléctrica de alta tensión conocida como Lada-Velilla, una autopista, de daño y deforestación, que atravesaba de norte a este la provincia leonesa. No se culminó, pero quedó recogido lo desaprensivo de su interés.
En 2006 lanzó una perorata para enmarcar: “El PSOE ha tenido un cuidado exquisito con la historia y el estatuto, dando a León el trato que merece; pero no podemos seguir enmascarando la realidad por pudor”. Se retrató. Nuestra decadencia es la prueba que contraponer a tal soflama.
Y en junio de 2007, también como secretario autonómico del PSCL, ratificó su convencimiento de que el mapa autonómico estaba “cerrado y no tiene marcha atrás” en torno a Castilla y León. ¿Puede caber más dolo?
Ahora que puede hable con el abogado leonés García Angulo, autor de las Vías Legales para conseguir León la autonomía, para dejar el ente que tanto nos ha esquilmado, él se lo explicará bien. Y si es que ya lo sabía, y no lo esgrimía a sabiendas, lo del dolo está agravado.
“Si el problema de Feve fuera en Valladolid”...
Volvemos a Feve. Hoy Ángel Villaba dixit: “Si el problema de Feve hubiera surgido en Valladolid, en tres meses estaría resuelto”. Acompaño en esa afirmación o creencia, pero en mí es de intranscendencia resolutiva, impotencia de ciudadano si se prefiere, pero en él, es sacar a la luz una falta suya de actuación política centralista nefasta para León, puesto que poder tenía para oponerse y defendernos, mas, no era lo suyo, durante su etapa en el ente autonómico abogaba por lo mejor para Valladolid (facción castellana) y para León, la Región Leonesa, coadyubaba a que fuera tratada como colonia.
De ahí que, ya fuera de la política activa, la actuación que tuvo como director de Feve, para León, una ambiciosa postura, tren-tram, acompañado posteriormente por el interés del entonces alcalde legionense Francisco Fernández para la integración de la vía estrecha como tranvía ciudadano, no lava sus pasajes políticos autonomicos de colaboracionista, que ayudaron al decaimiento leonés.
Llegados a este punto me permito recordar al lector interesado que en este medio, y sobre este tema publicó este medio mi artículo Recuerdo, nostalgia y rebeldía ante la amenaza para el 'Hullero' donde entre sencillas vivencias señalaba el daño que causaba y causa a León la incomprensión del tema Feve y la no llegada “a su hogar” de nuestro Hullero.
No sé si Villalba está en condiciones de hacer algo más que acompañar a los reclamantes hoy del tema Feve. No es poco dar la cara en este asunto que trató de defender, a su manera, cuando podía, y ahora esgrime justificaciones, pero no busque una mora verde para quitar la mancha autonomista, eso requiere, profesor, un mea culpa en toda regla.