Vamos a conjugar sentimientos y realidades vivenciales
Con la Moción por la Autonomía Leonesa aprobada en Bembibre pergeño este apunte leonés de opinión sobre un tema: El Bierzo. Comarca que siempre he tenido cuidado de observar y comprender, desde mi posición leonesista. Con visión política primero, como militante y luego como participe de Unión del Pueblo Leonés, a distancia lo confieso, salvo contadas ocasiones de partido.
Comparezco anunciando que surge hoy este escrito, desde el poso adquirido con el tiempo y mi parecer, avivado al leer días atrás, pocos, y en distintos medios, en verdad que con detenimiento, dos artículos, verdaderas variaciones discrepantes sobre el mismo tema: 'La gran mentira del bercianismo' de Rubén Silva, a quien no conozco; al igual que me ocurre con Lago Mestre que publicó 'La singularidad berciana persiste'.
Ruego me perdonen, ambos autores, seguro que es despiste por mi parte.
Próximos en fecha los artículos (a primeros de octubre), nada más, aun cuando, como se dice, los extremos se tocan. De la singularidad no dudo, lo de la gran mentira, me inquieta, a sabiendas de que del dicho al hecho hay gran trecho. Si bien es contundente, con hechos y pareceres bien relatados y parece que bien documentados. En algunos momentos demoledores. Mas, siempre he leído que nada hay más repartido equitativamente que la razón. Todos creemos tener la nuestra. Sin sacar lo proverbial del verdadero contexto donde se genera.
Lo importante es que podamos estar de acuerdo en que todos los que hemos nacido en León provincia... ¡Somos leoneses! Por supuesto sin olvidarnos de zamoranos y salmantinos que como tal se consideren Y ello independiente del grado de compromiso que tengamos en torno a la identidad leonesa. En tanto ésta es cultura y sentimiento.
El 'pueblo leonés'
Lo de matices diferenciales en función de cada comarca leonesa, que los hay, creo que no tienen porqué dividir, es pluralidad y es riqueza sociocultural, compartirla y aunarse un gran mérito, respeto y convivencia deben ir de la mano. Cito así al paisanaje, todo un vínculo, por más que sea una sencilla expresión entendible por todos, desde la que me manejo para replicar hoy; ayer y siempre lo he hecho así.
Y entiendo que a nadie debería molestarle que lo sustituya por 'pueblo leonés'. Ése que a pesar de estar bien marcado con un cuartel en el escudo constitucional de España, hoy se le trata sin respeto alguno, o se le ningunea. ¿Acaso Lago sacaría, y con qué fundamento, a El Bierzo de tal escudo? ¡Evolutivamente de dónde y hacia dónde como unidad diferenciada!
Dejamos en el aire el ámbito regional triprovincial vigente, solapado de forma inmisericorde por el ente autonómico llamado Castilla y León, dato grave que a todos nos concierne, pero no lo haré sin dejar constancia de que la región leonesa, es histórica, con tres provincias, León, Zamora y Salamanca. Siempre me gusta añadir herederas, muy directas, mas no del pleno territorio, del que fue Reino de León. Y estoy yendo a derecho y con simplicidad, pues no pretendo mucho más que mostrar mi parecer, no crear discrepancias.
No he escuchado a ningún leonés, con seriedad, criterio y formación, negar el reconocimiento territorial de El Bierzo. Pero tampoco que no haya otras comarcas o territorios, avalados por similares derechos a los que algunos que se dicen bercianos apuntan. ¿Qué hacemos con el mosaico comarcal del territorio leonés? ¿Acaso ha de ir por libre cada cual? Por cierto muy bien estudiado el tema cultural y comarcal, entre otros, por Javier Callado, y reflejado en su libro 'Qué es la cultura leonesa'.
Pero dejemos sentado que la comunidad autonómica, está alejada de toda ecuanimidad distributiva, y volcada en el amarre de todos los leoneses en un estatus socieconómico, obligado y de subsistencia; por ello merece, como bien se ha dicho, calificarla de... ¡Fallida! La parte leonesa, provincial y regional, ha sido esquilmada, cual colonia, y para más dolo dejada fuera de todos los avances viarios y ferroviarios de connotación nacional y europea.
La facción castellana, y en los papeles está, tiene mucho mejor PIB; y desarrollo industrial creciente, y no digamos Valladolid que empezando porque se ha arrogado todos los beneficios de la capitalidad del ente, sin estar recogida tal cosa estatutariamente, ha llegado a usurpar el papel de gran 'Nudo del Noroeste', anulador de lo leonés… ¡Si no lo queremos ver así, mala cosa!
Recordemos, y no de forma banal, que Ponferrada fue el primer Ayuntamiento en pedir la autonomía leonesa el 19 de enero de 1983…
Pragmatismo de cara al futuro de León
Vamos a lo pragmático: O nos unimos los leoneses para ir en busca de la propia autonomía, o nadando en disquisiciones nos veremos cada vez más inmersos en un preocupante nivel vida. Por supuesto empujados por el maltrato autonómico, algo que, tozudamente nos anuncian bien los datos socioeconómicos… ¡Y los soportamos!
Aquí, y no para cerrar, sino con ánimo de dejarlo para reconsiderar situaciones, posturas y pragmatismo, recojo algo de lo que el berciano José Luis Prada, dejó claro durante su intervención en el Auditorio de León ….“aprovechar la sinergia que se produce cuando estás en una provincia y hay regiones diferenciadas”, ya que “al final todo tiene que complementarse para que las cosas funcionen…. ”De lo contrario, sería ir directamente a un pozo que ya no tiene fin“. ”Cuando una región y una provincia están unidos van hacia arriba“.
Si ha fallado el ente para los leoneses, y además lo siguiente es no enmendalla desde el poder autonomista, es evidente que hemos de salirnos. ¡Pero ya! Y como soluciones hay: ¡LEXIT!