Nocturnidad y división sindical ante un posible acuerdo para que una láctea supla a Lar y recoja leche en Babia y Omaña

En plena noche y sólo tras darse a conocer la convocatoria este martes de una protesta conjunta de los principales sindicatos agrarios con representación en la provincia de León, la Junta de Castilla y León aireó sin apenas detalles que se pondrá en marcha una inminente solución para retomar la recogida de leche de las últimas explotaciones de la Montaña de León. Se trata de cinco ganaderos de las comarca de Babia y Omaña que estaban teniendo que tirarla tras abandonar la semana pasada la ruta de recogida la Cooperativa de Leche Lar, inmersa en una crisis financiera que intenta capear.
En un comunicado remitido pasadas las nueve y veinte de la noche, la Junta informaba que “una empresa láctea de la provincia de León comenzará a partir de este miércoles a recoger la leche” a los cinco ganaderos afectados en los municipios leoneses de Cabrillanes, Murias de Paredes y San Emiliano que todavía no habían encontrado alternativa para la salida de producto, el cual estaban teniendo que tirar junto al abono de sus animales en medio de una gran desesperación.
Ni la Consejería de Agricultura y Ganadería ni la Delegación Territorial de la Junta en León facilitaban en modo alguno el nombre de la empresa mencionada, pocas horas y días después de que las mismas fuentes hubieran hablado de un acuerdo muy similar cerrado en este caso con otra empresa de Palencia, la cual tampoco se identificaba en ningún momento. Lo único que ahora detalla la administración autonómica, entre fuertes críticas por dejar tirados a los últimos ganaderos de lácteo de la montaña leonesa, es que la recogida se retomará de manera inminente, este miércoles 15 de enero, tras un acuerdo del que tampoco ofrecen detalle alguno.
Además, la Junta asegura en el comunicado que aún “estudia posibles fórmulas de compensación” para paliar en la medida de lo posible las consecuencias derivadas “de la situación excepcional sobrevenida del cese de la actividad de la cooperativa LAR”, con lo que tampoco en esto se detalla ni se ha decidido la puesta en marcha de aportaciones económicas, que reclaman ganaderos y sindicatos del campo. Esa resistencia a poner dinero, como la Junta sí ha puesto en otras ocasiones, en otros territorios y en casi todos los sectores, no sólo ganaderos, ya la dejaba caer el pasado jueves el portavoz del Gobierno autonómico del PP, Carlos Fernández Carriedo.
A pesar de la falta de detalles concretos, la Junta saca pecho en su comunicado con nocturnidad, asegurando que “han estado trabajando en la búsqueda de alternativas” a la crisis de Lar “y los problemas derivados de su gestión”, señalando así a esta cooperativa leonesa. Como ya se sabía desde que hace meses ILEÓN publicó la delicada situación de la firma con sede en Veguellina de Órbigo, el resto de las rutas de recogida por la provincia eran fácilmente solventables por otras firmas. Y así ha ocurrido con la mayoría de las 15 rutas en total afectadas, que pronto tuvieron sustituto y no hubo que tirar la leche, pero abocando a una grave crisis a las más alejadas, las de la montaña.
La maniobra de la Junta ha conseguido, además, romper la delicada unidad de acción de las organizaciones profesionales agrarias (OPAs), que tenían convocada una protesta conjunta por esta crisis hoy ante la sede autonómica en el barrio de Eras de Renueva en León capital, firmada en principio por Asaja, Ugal-UPA y Ucale Coag.
El tenso escenario sindical
Sin embargo, tal protesta no tendrá lugar, entre críticas cruzadas. Ugal se ha desvinculado tras la vaga información oficial, asegurando que no acudirá a la protesta al estimar como “acuerdo beneficioso” el alcanzando por la Junta para las cinco explotaciones de Cabrillanes, Murias de Paredes y San Emiliano. “Desde Ugal-UPA celebramos esta decisión y nos comprometemos con los ganaderos de la zona a vigilar que se cumplan los términos acordados para que las cinco explotaciones retomen su actividad y continúen desarrollándola con normalidad”, firma Eduardo Padierna, responsable de Ganadería del sindicato.
Por su parte, Asaja afea con dureza esta decisión indicando en otro comunicado que “no comparte la estrategia de desconvocar el acto de protesta por el simple hecho de que la Junta haya convocado una reunión informativa” para una hora más tarde de la fijada por ellos, asegurando que ambos actos “hubieran sido perfectamente compatibles” porque “siempre se debe de mantener la presión en la negociación hasta que haya un acuerdo definitivo y satisfactorio”.
El sindicato que en León dirige José Antonio Turrado, de hecho, recuerda el 'baile' sobre este asunto, ya que “ayer, en el momento de efectuarse la convocatoria del acto de protesta, la Junta ofrecía el servicio de recogida de una cooperativa palentina, y los propios ganaderos tenían que encargarse del transporte hasta un punto próximo a la capital leonesa, sin recibir compensación alguna por ello, algo a todas luces inviable y por lo tanto descartado. Y pocas horas después, al parecer hay otra oferta, en este caso de una empresa leonesa, que asumiría con sus recursos el coste de recogida sin repercutirlo en el precio de compra”.
También advierte de que “no parece contemplarse la propuesta inicial” de Asaja “de otorgar una ayuda permanente a las empresas que recojan leche en rutas de montaña, para compensar los mayores costes de recogida, como ya existe en otros territorios”, si bien concluye que analizará la letra pequeña y aceptará la solución si la considera seria y viable.