Alertan de que la crisis de Lar pone fin a toda la recogida de leche en las últimas explotaciones de montaña de León
El sindicato agrario Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) exige a la Junta de Castilla y León y a la Diputación de León que intervengan de urgente y directa para evitar el cierre de las últimas explotaciones de ganado vacuno de leche de la montaña que sobreviven en León, en concreto en las comarcas de Babia y Omaña.
La situación se ha vuelto crítica, denuncia Asaja, tras el anuncio de la Cooperativa Lechera LAR, que según el sindicato ya se encuentra en situación concursal, que cesar desde este mismo martes 7 de enero su actividad de recogida en estas zonas, dejando así a los ganaderos de ambas comarcas sin alternativa en el servicio de recogida de leche.
La delicada situación financiera de la Cooperativa LAR, histórica entidad fundada hace 58 años y radicada en Veguellina de Órbigo, tal y como contó hace meses ILEÓN, se atribuye a una ambiciosa operación financiera y crediticia que no ha dado los resultados esperados. Según fuentes próximas al sector, LAR enfrenta pagos en plazos más cortos de lo previsto inicialmente, lo que ha tensionado su sostenibilidad. Además, el rendimiento inesperadamente bajo de nuevas infraestructuras, como un secadero de maíz recientemente construido en su localidad sede, ha agravado su situación económica, de la que sus nuevos gestores intentan salir.
Los sindicatos agrarios ya habían alertado en otoño que si bien la recogida de leche en muchas zonas de la provincia que hasta ahora cubría Lar podría, en teoría, ser asumida por otras empresas sin demasiados problemas, otras más alejadas y con poblaciones rurales dispersas en la Montaña Occidental de León, lo tendrían más difícil para encontrar una alternativa a sus entregas de leche, algo que ahora parece confirmarse en la peor de las situaciones.
“Han resistido como campeones”
El problema para encontrar otros compradores radica en que los costes de recogida “son inasumibles, debido a la distancia, a la orografía, y a que el volumen de leche se ha ido reduciendo, y no a que no haya demanda”, advierte el sindicato que dirige en León José Antonio Turrado. “Los ganaderos de estas comarcas de alta montaña han mantenido su actividad con un gran sacrificio personal, por la dureza de la profesión donde es difícil la mecanización, por el minifundismo, por la dificultad para conseguir buenas condiciones de venta, y por los mayores costes en todas las inversiones y los insumos que se emplean en una ganadería. Han resistido como campeones, han tenido mucho mérito”, remarca. Y es que lamenta que “nadie se lo ha agradecido ni nadie le ha pagado el esfuerzo que han hecho, porque para quién trabaja no suele haber ayudas”.
La organización agraria ha advertido que la falta de recogida de leche obligaría a los ganaderos a desechar su producción en fosos de purín, una situación que considera inadmisible y contra la que pide una intervención inmediata de las administraciones.
Para afrontar esta crisis, Asaja en concreto propone una acción conjunta de la Junta y la Diputación de León, valorando varias iniciativas. Así, piden por ejemplo a la Junta la concesión de subvenciones específicas, articulando ayudas dirigidas a la producción lechera en zonas de montaña, complementarias a las establecidas por la Política Agraria Común (PAC). Y de la Diputación reclaman una financiación de la recogida de la leche, es decir, que la institución provincial asuma el 100 % de los costes de recogida, ya sea mediante ayudas directas a los ganaderos o incentivos para las industrias lácteas.
Asaja también solicita la convocatoria urgente de una reunión con representantes de la Junta, la Diputación y los ayuntamientos implicados, tales como Murias de Paredes, Riello, Cabrillanes o San Emiliano, con el fin de garantizar una respuesta inmediata y evitar el abandono de estas explotaciones.
Ugal también se posiciona... sólo ante la Junta
Por su parte, con un comunicado posterior, el sindicato Ugal-UPA ha reclamado en su caso sólo a la Junta de Castilla y León que, como ha hecho en otros casos en la Comunidad, busque una solución al anuncio de cese de actividad de recogida de leche por parte de la cooperativa LAR. “Estamos hablando de que la leche LAR es de origen cien por cien leonés, y lleva como marca en los lineales de tiendas y supermercados desde el año 2010, por lo que la Junta debe demostrar con hechos que apuesta por defender el producto local, de cercanía y de valor añadido para el territorio rural”, exigen.
La formación cree que con la no recogida de la leche “se les deja al pie de los caballos, sentenciándolas a muerte”, y entiende que la Junta debe defender el sector lácteo provincial por ser un sector estratégico por causas sociales, económicas, territoriales y medioambientales, entre otras, y “como tal debe ser tratado”. Además, una vez que se cierra una explotación láctea es “imposible que se reinicie la actividad”, con todo lo que ello conlleva para un emblema como es para la provincia leonesa la leche LAR y los ganaderos locales que la producen, ha concluido la organización agraria.