Escapada con la casa sobre ruedas: León saborea la libertad de caravana y camper
Cada vez más leoneses optan por planificar sus vacaciones porque buscan libertad y flexibilidad. Esta tendencia, lejos de ser pasajera, ha demostrado ser una reinvención del viaje, ofreciendo una forma única de explorar el mundo con la casa a cuestas.
El auge de los viajes en caravana ha dado lugar a una vibrante comunidad de entusiastas. Gracias a redes sociales y foros especializados, los viajeros comparten rutas, consejos y experiencias, fomentando un sentido de camaradería.
La principal atracción de viajar en caravana es la libertad que ofrece. Lejos de los itinerarios rígidos y las multitudes de los destinos turísticos convencionales, la caravana permite a los viajeros diseñar su ruta, cambiarla a su antojo y detenerse donde más les plazca. Esta libertad de movimiento es especialmente atractiva en un mundo que valora cada vez más las experiencias personalizadas y auténticas.
Viajar en caravana puede ser una opción económicamente atractiva. Aunque la inversión inicial o el alquiler de la caravana tienen su coste, se ahorra en alojamiento, comidas y otros gastos típicos de los viajes tradicionales. Además, esta forma de viajar promueve la sostenibilidad, ya que reduce la huella de carbono asociada a vuelos frecuentes y alojamientos masivos.
El viaje en caravana permite a los viajeros llevar consigo su espacio personal, reduciendo la necesidad de interactuar con extraños o compartir instalaciones. Además, la comodidad de tener todo lo necesario al alcance —desde la cocina hasta el dormitorio— crea un ambiente de hogar lejos de casa. Además, sumerge en la naturaleza, ya sea despertando con vistas a montañas majestuosas, durmiendo bajo un cielo estrellado o desayunando frente al mar.
A pesar de sus muchas ventajas, viajar en caravana también presenta desafíos. La planificación y la logística requieren atención, desde el mantenimiento del vehículo hasta la gestión de recursos como el agua y la electricidad. Además, es esencial ser consciente de las normativas locales sobre estacionamiento y acampada para garantizar una convivencia armónica con las comunidades visitadas. Pero para todo ello se puede contar con el asesoramiento de profesionales, como con los que nos han abierto las puertas de sus caravanas.
Vanlife Leon
“Hace 8 años, importando un coche coincidí con un italiano casado con una española en una habitación de ferry, poco a poco fuimos entablando conversación hasta que llegamos a hablar de autocaravanas, ya que yo estaba metido en el mundo furgo y sentía una gran atracción por el tema. Este me conto que él una vez compro una y la importo a España haciendo un buen negocio. A la semana siguiente estaba en Italia comprando una autocaravana sin saber cómo funcionaba... a día de hoy hemos importado más de 300 autocaravanas”. Así relata Alejandro Cuadrado Abril, administrador de Vanlife León, el origen de su pasión y de su negocio, importando vehículos en todo el mundo, pero, principalmente, de Bélgica, Francia, Italia y Alemania.
Lo primero de todo es obtener el COC o ficha técnica reducida para pasar la ITV y poder matricularlas en España. Una vez esta esto listo anuncian y se ponen manos a la obra, realizado un cambio de aceite, filtros y el mantenimiento necesario para que el cliente no se tenga que preocupar de nada en 15.000 kilómetros.
Respecto a las mejoras de las autocaravanas, lo más importante es hacer las juntas de estanqueidad para evitar la entrada de agua hacia el interior, ya que sobre la madera se va pudriendo. También realizan un mantenimiento y una revisión sobre todos los elementos originales equipados en la autocaravana como nevera, calefacción, calentador de agua caliente y horno. “Otra parte muy importante es la limpieza de cara, dándoles un buen pulido exterior, limpieza de techo y todo lo necesario para que brinden un aspecto inmejorable”, explica el manitas. Con toda esta lista de tareas es normal que cada caravana sea un mundo y según cómo lleguen a su taller les puede llevar desde un día a una semana.
Quisieron poner a prueba la calidad de su trabajo cuando el año pasado hicieron el reto ‘Vanlife’. “Fuimos capaces de llegar y volver con una de nuestras autocaravanas atravesando toda Europa hasta Levi, en Finlandia, junto con nuestro perro. Llegamos a temperaturas de -27° y fuimos conduciendo durante semanas por nieve y hielo. Fue una experiencia muy extrema y bonita, pudimos disfrutar de paisajes espectaculares, auroras boreales…”, comparte su memorable hazaña.
Así que tras esta prueba de hielo es normal que tengan tantos aventureros que cuenten con ellos. “Nuestros clientes principales son familias y parejas. Últimamente hemos notado una gran demanda sobre todo en islas, de gente que no quiere hacer frente a los precios abusivos de los alquileres y se van a vivir a autocaravanas para hacer la estación de verano”, comenta Alejandro.
La mayoría de esos clientes vienen de fuera de León, pero ven que en la provincia hay mucho amor por el mundo camper. “Por suerte, tenemos una provincia increíble y muchos rincones mágicos por descubrir, tanto si te gusta la naturaleza, los ríos, la montaña... Tenemos donde disfrutar”, asegura.
Estoy muy contento porque siempre que las visito están concurridas, por lo que podría asegurar que actualmente un gran número de turistas usan la autocaravana para visitar la provincia
Alejandro pone en valor las nuevas áreas de autocaravanas promovidas por el Ayuntamiento de León, que considera que están muy bien equipadas, céntricas y con todos los servicios necesarios. “Estoy muy contento porque siempre que las visito están concurridas, por lo que podría asegurar que actualmente un gran número de turistas usan la autocaravana para visitar la provincia”, remarca con mucho orgullo.
Sin embargo, reconoce que dentro de los inconvenientes con las caravanas es que no todos los ayuntamientos las reciben con buenos ojos. Un problema al que se suma a los posibles riesgos que puede suponer pernoctar en zonas no muy transitadas. Pero a pesar de estas cuestiones, como experto en el sector Alejandro tiene claras todas las ventajas que ofrece una caravana: “Independencia total, no dependes de nada ni nadie simplemente organizas tu camino a tu gusto, no tienes que planear basta con improvisar e ir descubriendo. Además, puedes disfrutar solo, en pareja, con amigos o con familia”.
Wild Road Camper
La cuenta de Instagram de Wild Road Camper se creó unos meses antes de la pandemia, pero fue durante esta cuando Cecilia Riesco González decidió que era el momento de empezar a camperizar furgonetas para otras personas y desde entonces no ha parado.
“Camperizar es convertir una furgoneta de carga o comercial, en un furgón vivienda. Es hacer realidad los sueños de personas que quieren conocer mundo viajando con su casa con ruedas”, describe con mucha pasión. En España prácticamente cualquier modificación que se haga en las furgonetas, se tiene que homologar (como abrir ventanas, instalar electricidad, baterías secundarias, etc). El siguiente paso es hacer un informe por un ingeniero, y con eso, ir a la ITV a que se revisen y legalicen dichos cambios.
“Todos mis trabajos son 100% personalizados, artesanos, y hechos a medida según los gustos y necesidades de cada cliente, pero siempre utilizando la madera como material principal. Creo que eso es lo que nos diferencia, la originalidad, el que no haya dos furgonetas iguales, y siempre incluir algún detalle característico de mi trabajo, como puertas o mesas con formas geométricas, divisiones en madera entre cocina y cama, etc. Me escribe gente diciendo que vio una furgoneta y sin ver el logo ya sabía que la había hecho yo, y eso me hace feliz”, confiesa muy orgullosa. Y no es para menos.
La clientela de Cecilia es muy variada: Desde parejas jóvenes que se lanzan a la aventura juntos, como una persona jubilada que ahora pasa prácticamente todo el año viviendo en su furgoneta en Tarifa. Pero sobre todo le llegan clientes de ciudades grandes como Madrid, Barcelona o Valencia, donde este tipo de trabajos suelen ser más caros y las listas de espera mayores. Aunque también sus paisanos leoneses cuentan con su mano de obra. Lamentablemente, el tiempo manual que conlleva su trabajo y la cantidad que pedidos que tiene, Cecilia no coge nuevos encargos hasta después de septiembre.
Según Cecilia, el Ayuntamiento de León está poniendo bastante de su parte en fomentar este tipo de turismo, ya que se crearon dos áreas de áutocaravanas y campers más (en La Palomera y en la Granja), además de la que ya existía hace tiempo en la zona del León Plaza, y todas ellas con servicios gratuitos.
“Tengo muchos amigos de fuera, incluso del extranjero, que han conocido León gracias a viajar en furgoneta, porque por ejemplo vieron que las zonas de Picos de Europa, Riaño, Babia, etc. Eran preciosas y en las apps de Areas Camper tenían buenas valoraciones, y decidieron hacer esos viajes, y conocer la provincia de León y su ciudad de una forma diferente. Y los propios leoneses, que ya la conocemos, no dejamos de descubrir rincones mágicos donde poder pernoctar y acampar (donde esté permitido)”, explica la artista.
Tener un jardín diferente al despertarte cada día
Para Cecilia viajar en caravana es una filosofía de vida con muchas ventajas. Desde lo que te ahorras en hoteles a la libertad de poder cambiar de lugar si no estás a gusto, conocer a gente personas de diferentes lugares, pero con el mismo estilo de vida; y como se suele decir “tener un jardín diferente al despertarte cada día”.
Sensibilidad
Tampoco oculta algún inconveniente, especialmente el de “tomar consciencia y ser respetuosos, ya que cada vez va a haber más furgonetas y autocaravanas, pero no todo está permitido”. “Si en una zona se nos permite estacionar y pernoctar, pero no acampar (sacar sillas, toldos, etc.), no debemos hacerlo, y tenemos que ser nosotros mismos quienes nos corrijamos ese tipo de comportamientos, porque si no, cuando a los que de verdad no les gusta este tipo de turismo, se cansen, van a cambiar leyes y lo restringirán para todos”, augura.
El boom de los viajes en caravana refleja un cambio profundo en la manera de explorar el mundo, privilegiando la libertad y la conexión con la naturaleza. A medida que esta tendencia continúa añadiendo distancias en el cuenta kilómetros, promete seguir ofreciendo experiencias ricas y memorables a quienes eligen la carretera menos transitada, redescubriendo el placer de viajar a su propio ritmo.