Tudanca iba en clave de despedida, pero…

Tiempo atrás el señor Tudanca se estuvo dejando ver en los medios, en encastillada posición se arrogaba poder y fuerza, jugando sus bazas, pensaba que con cartas ganadoras, las que le iban a otorgar las bases castellanas. Y no debían ser tales, ni en su propia mesa burgalesa, sobre la que pretendía exhibir su propia lista de aspirantes a escaño…

Un gran fallo, siendo esta como es, una extraña democracia… partidista en la que entra en juego el 'dedo divino', del que habló muy atinado cuando intentaba esa aparente postura de fuerza, al parecer no bien medida, no mucho antes de la Navidad 2024. ¡El Nadal de feliz ensueño tiñe todo de euforia!

Lo de jugar a ganador, por genio, y algo menos por figura, al punto de poder echarle un pulso al aparato del partido, aun acudiendo como reforzamiento coyuntural a las bases.. ¡Era menos que nada! No sé si se miraba en el espejo de Sánchez, cuando supo ganarse la voluntad de los militantes. No era el caso, señor Tudanca, usted lo tenía al borde de lo imposible, pero lo intentó.

Echado aquel órdago a Ferraz (“primarias… lo que yo decida”) le hemos visto salir en la prensa saludándose, y el gesto es lo de menos, con el señor Carriedo, PP y autonomista ejecutivo en ejercicio, tratando de, con la promesa de un apoyo parlamentario a los presupuestos, conseguir un reforzamiento personal, que pronto se diluiría. Mal amigo de viaje es el PP, en este caso el señor Carriedo que está en preferencial postura, juega a magnánimo, cuando en verdad tan sólo está tratando de asentar otro año de legislatura. Lo de “voluntad y diálogo”, que se dijo del encuentro, no eran más que palabras vanas.

El reto a Cendón

Ensayó lo de apoyarse en un bastón (débil), no por lo físico, sino por el escaso afianzamiento partidista del señor Diez, el legionense alcalde, para lanzar aquel reto a Cendón, de que se atreviera a llevar la petición de la Autonomía Leonesa al congreso federal PSOE. Juegos florales. De sobra conocía la postura cendoniana del acérrimo amarre leonés al ente autonómico. Otros lo hicieron en el 41.º Congreso de Sevilla, a hurtadillas y abandonos; de ello ya hablaremos.

En octubre pasado, he de confesarlo, ante la fotografía, Diez, Cendón, Tudanca, tres sonrisas y sobrevolando Ferraz, mi medición gestual fue: Diez , el regidor, con autoridad. Un pasito pa'lante… Cendón, gesto soberbio. Un pasito pa’tras… Tudanca; quien ya, en repliegue subconsciente, intentó jugar otra baza, con aquello de lo leonés diferenciado. Tres bolas, sobre la mesa… de billar, del verde que te quiero verde y el choque tac, tac de lo inalcanzable.

Corto plazo para su evaluación tenía Tudanca. De modo que, pasados el congreso federal y los Reyes Magos, aparecieron los plazos marcados “allá en lo más alto del PSOE nacional”. Y todo cambió. Ya sin estrella que le guiara, o siguiendo la tenue ráfaga “del buen comportamiento que le llevara más allá”, replegó postura con aparente voluntad de agradar… ¿Para seguir?

El candidato de Ferraz, el señor Martínez, alcalde de Soria, tocado por el “dedo divino”, ya ha aceptado el alto puesto autonómico. Sin escaño en las Cortes autonómicas, se enfrenta a una “indisposición” transitoria. De pronto, se fija en Tudanca, que, jugando a tentetieso, pasaba por ahí tratando de vestir su condescendencia como de comprensión partidista, y hete aquí que le ofrecen seguir con la portavocía, al parecer acepta , y todos tan contentos. Y, con supuesta prosapia, dice “que va a seguir pidiendo cosas para los castellanos y los leoneses” (apréciese el doblado pronombre)

“Y me da pena (pues me caía menos mal) y me causa estupor”… Sinceramente me cuadra más como pundonor sometido de quien, tras el desliz, se coloca en disposición interesada de quedar bien “con los suyos”, los que componen las listas, los de la ejecutiva central nacional. ¡Lo leoneses que crean lo que quieran!

El señor Martínez, el alcalde soriano, Secretario autonómico digital, para estrenarse dice reconocer el sentir leonesista, pero la cadena de sujeción que nos amarra, debe seguir, pues según él: ¿Adónde vamos a ir solos?

Señor Martínez, mi respuesta es clara: Con el ente autonómico... ¡¡¡A la nada!!! Solos, libres y con autogobierno... ¡¡¡A por todo!!!

En lo provincial leonés también hay juego de tronos, de intereses, y el muñidor oficial señor Cendón, aun siendo de León, lo de leonés se le queda en gentilicio. Al parecer en Madrid se le escucha, y parece ganar firmeza. ¡Inquietante!

Ahí, en lo provincial, puede participar el alcalde legionense. Con él va una tenue aureola de leonesismo. Ilusiones leonesistas la justas... ¡Pero las hay! Carambola y preparando…