La fundición Nord Casting cierra su factoría de La Robla despidiendo a un centenar de trabajadores

Protesta en la empresa Nord Casting en la fundición de La Robla.

Redacción ILEÓN

La empresa de fundición de origen vasco Nord Casting ha decidido cerrar su planta de La Robla y echar a toda su plantilla, que ronda el centenar de trabajadores, que ya se encontraban en situación de ERTE desde que en junio pasado la empresa presentó concurso de acreedores.

El sindicato CCOO explica que el administrador concursal de Nord Casting les ha comunicado que han solicitado un Expediente de Regulación de Empleo para toda la plantilla, lo que supone el cierre total de su factoría roblana. Nord Casting pertenece al grupo vasco Mekatar y los sindicatos ya han advertido en todo este proceso de una situación que les hacía pensar que se buscaba una deslocalización de la producción y su cierre, cosa que finalmente ha ocurrido.

El pasado mes de junio la empresa solicitó preconcurso de acreedores y envió a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) a la plantilla hasta septiembre, que luego prorrogó bajo las denuncias de los sindicatos que se buscaba un cierre total. Los trabajadores llevan movilizados desde la pasada primavera ante los impagos y las promesas incumplidas sobre la situación de la factoría metalúrgica.

CCOO Industria señala que en la crisis de Nord Casting y el centenar de empleos que se llevará por delante ha habido “poca voluntad política” para buscar una solución y supone “una nueva tragedia industrial en la provincia de León”. Denuncian que la Junta de Castilla y León “no ha realizado gestión alguna para la búsqueda de viabilidad, dejando totalmente inoperativa la Fundación Anclaje”.

Además señalan que la empresa “no ha buscado vías alternativas al mantenimiento de la actividad industrial de la planta, y tan solo ha buscado el desvincularse de toda responsabilidad, para no hacer frente a los salarios adeudados y las indemnizaciones, dilatando los tiempos para proceder a un Concurso Voluntario de Acreedores, lo que podría incurrir a nuestro entender en un Concurso de Acreedores Doloso”.

El sindicato cuestiona el consurso ya que en la documentación no se hace mención a que el grupo vasco Mekatar es el propietario, sirviendo las piezas de La Robla a otras del grupo “por lo que se obvia información determinante y de nexo de unión de la cadena de valor y su composición económica y financiera”.

El Juzgado de lo Mercantil de León deberá ahora resolver la petición de ERE de la administración concursal e iniciar el periodo de consultas para su formalización, que de ejecutarse deja en el paro a un centenar de trabajadores.

Etiquetas
stats