Luis Mateo Díez publica nueva novela: “El poder neutraliza la imaginación e inventa lenguajes para sosegar”
El escritor leonés Luis Mateo Díez, Premio Cervantes 2023, ha criticado este viernes que hay un exceso de actualidad que empobrece la imaginación y favorece al poder y ha puesto como ejemplo el caso de la DANA y la resistencia del president de la Generalitat, Carlos Mazón, a presentar su dimisión.
“Si este petardo de señor al día siguiente (de la DANA) dice que no estaba donde debía estar, pide disculpas y se va, ya estaríamos con otras cosas”, ha dicho, pero “el poder busca soluciones de continuidad para que la actualidad vaya y venga, se diga y desdiga”.
“Hay demasiada actualidad y es tan tremenda y asaltadora que nos quita capacidad de imaginación y nos extorsiona el ánimo con el desasosiego”, ha agregado el también académico durante la rueda de prensa de presentación de su nueva novela, El vigía de las esquinas (Galaxia Gutenberg).
Preguntado por la polémica entre el Instituto Cervantes y la RAE, que explotó hace unas semanas por unas declaraciones de Luis García Montero descalificando al director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, Mateo Díez se ha mostrado prudente.
Desorden
“Me quedo conmocionado, no sé cómo puede pasar, es una manifestación del desorden de los tiempos, la incapacidad de entendernos, decir cosas inadecuadas y estar donde no debes”, ha dicho.
Poco antes había hecho una alusión indirecta al caso al describir ese “desorden” que marca esta época -y que retrata en la novela- como un “desvivir penoso de países enfrentados, de partidos políticos echados a perder, de odios aborrecibles y de gente que insulta y echa a perder una institución, como pasa por aquí”.
El vigía de las esquinas es una fábula con tono de farsa sobre un “periodista desquiciado”, pero con cierta lucidez, que recorre un mundo que se derrumba, una “ciudad de sombra” en una provincia imaginaria, en línea con anteriores novelas del creador del territorio mítico de Celama.
Humor y expresión
“Todo se pone en tela en juicio”, ha señalado durante la presentación la doctora en Filología Hispánica y catedrática de Literatura Española Ángeles Encinar, experta en la obra de Mateo Díez, que también ha hecho hincapié en el uso de un humor “paródico, expresionista y con un matiz esperpéntico”.
Mateo Díez, dos veces ganador del Premio Nacional de Narrativa y otras dos del Premio de la Crítica, ha subrayado su alejamiento de cualquier vocación realista -el lugar y tiempo son indeterminados y hay un aire fantasmagórico y nebuloso-, pero ha dejado claro que los ecos de actualidad se han colado en ella.
Hay un “residuo melancólico”, ha señalado, que tiene que ver con “la desgracia de vivir en un mundo que estaría en su mejor momento pero es fraudulento y desgraciado”.
El autor cree que “la democracia se está yendo al garete”, que “ciertos valores de convivencia se han echado a perder”, hay “un descrédito ideológico y un deterioro de las creencias” y ante eso “afloran elementos catecumenales” y “los sectarismos aúpan ciertas salidas”.
El escritor y académico ha leído algunos pasajes de la novela para mostrar la importancia del uso del lenguaje, por parte de algunos personajes, de una forma farragosa y críptica que también remite a la actualidad.
“Tengo la sensación de que vivimos en un mundo donde hay un uso del lenguaje que intenta esconder la claridad”, ha lamentado, “tanto neologismo ideológico nos mete en un delirio verbal” y contribuye a que la sociedad esté “neutralizada”. “El poder neutraliza la imaginación e inventa lenguajes para sosegar y tamizar”, ha dicho.