Conoce todo sobre las chinchillas con Bruno
La chinchilla era un animal desconocido para Daniel hasta que Bruno llegó a su casa y se convirtió en su ojito derecho. “Es el animal idóneo, después de un perro o un gato, en cuanto a independiente y cariñoso”, asegura el joven leonés.
Tiene cinco años y medio pero, según confiesa su dueño, el trato en cuanto a atención, preocupación y, porque no, consentimiento y caprichos hacia el animal, es “como si tuviera un año”.
Daniel describe la especie de su mascota como animales “muy limpios y bastante sociables. También son bastante tímidos pero cuando cogen confianza son muy cariñosos”. A Bruno le encanta que le rasquen y le acaricien.
Alimentación
En cuanto a la dieta, la alimentación de la chinchilla debe de estar basada en una combinación de alimentos secos y frescos. Tienen un aparato digestivo delicado y propenso a problemas intestinales y parásitos del agua.
“Yo le doy heno y pienso especial para chinchillas que venden en cualquier tienda de alimentación de animales”.
Además, a Bruno le gustan las galletas, el pan duro, las avellanas y las nueces, y de entre los alimentos frescos prefiere la zanahoria, la manzana y la lechuga. “Pero su debilidad por encima de todo son las pasas, su golosina preferida”, explica Daniel.
El pelo de las chinchillas
El dueño de Bruno insiste en que se trata de animales de costumbres y, por este motivo, “es bueno que siempre estén en un mismo sitio ya que notan todos los cambios por pequeños sean”.
La suavidad de su pelo es una de sus mayores características y se debe cuidar para mantenerlo sano y fuerte, además de potenciar su brillo. “Les gusta mucho que les cepillen el pelo y que se les trate de manera suave, sin brusquedades”. Además, su pelaje también constituye un arma de protección, puesto que tienen la capacidad de soltarlo para defenderse, con lo cual el depredador se quedaría con sus pelos y la chinchilla podría escapar.
El baño es una de las mayores curiosidades que presentan los cuidados de las chinchillas. No deben de mojarse bajo ningún concepto ya que su denso pelo tarda mucho en secarse y correrían el riesgo desarrollar hongos o de enfermedades como resfriados o neumonías mortales. “Diariamente pongo un plato con arena especial de marmolina y se reboza literalmente como una croqueta quedando dormida dentro del propio plato”.
Más acerca de las chinchillas
Sus patas traseras están muy desarrolladas, y su cola les permite un buen equilibrio, lo que, en conjunto, proporciona a las chinchillas la posibilidad de dar grandes saltos y ser buenas escaladoras.
Su esperanza de vida se sitúa entre los 12 y los 15 años.