El Ayuntamiento baraja muy en serio el cierre de la Fundación León Real

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j manuel lópez

La Fundación León Real fue creada hace dos años por el Equipo de Gobierno PSOE UPL con motivo de la conmemoración del 1.100 aniversario del Reino de León y con vocación de futuro, pero parece que el trayecto ha llegado a su última estación. El teniente de alcalde y por tanto su actual presidente, Agustín Rajoy, encargado también del área de Hacienda, ha señalado entre sus allegados que el futuro “se pinta feo” y que la fundación podría pasar a mejor historia en los próximos meses.

Los 150.000 euros de presupuesto del último año, en 2010 la cifra había sido el doble, es una suma imposible de aportar, justo en este momento en el que el equipo de Emilio Gutiérrez busca cómo ahorrar hasta el último euro posible y para ello ha emprendido un detallado escaneo de todos los plueses que se cobran y que, en la mayoría de los casos, también desaparecerán.

Desde la filas de la oposición, el portavoz leonesista Javier Chamorro tiene previsto en los próximos días elevar una pregunta al Equipo de Gobierno para que explique qué planes tiene para esta Fundación, que entre bambalinas municipales se da por próxima a su fin. Los primeros indicios se vislumbraron en el verano. Poco después de la toma de posesión de los nuevos responsables municipales se procedió a la renovación de todos los patronatos, fundaciones y sociedades en las que está representado el ayuntamiento. No sucedió con la Fundación León Real, aunque en su momento se justificó esta decisión ante la urgencia de otras medidas como la revisión del estado de las arcas municipales, cuyos resultados ya conocidos en lo que corresponde a las grandes cifras refuerzan la idea de su desaparición.

Falsas promesas

A la Fundación se le achaca un muy escaso eco de sus actividades en el ámbito leonés y totalmente desconocidas fuera de los límites de la provincia. Aparte de varias exposiciónes, el famoso record Guiness de concentración de Pendones y poco más, el principal sello de indentidad de la Fundación fue un trabajo audiovisual encargado a Juan Pedro Aparicio tan críticado por el elevadísimo coste y su nula incidencia, como denostado por su contenido.

En la mente de Agustín Rajoy no figura la convocatoria a corto plazo de una sesión de renovación del Patronato porque sabe que el tiempo corre a su favor y que las medidas drásticas que se emprenderán en las próximas semanas, en las que nada se ha descartado, acallarán cualquier voz que reclame reactivar una fundación muy cara y que ha servido no se sabe muy bien para qué.

No obstante Javier Chamorro recuerda que la Consejera de Cultura en el último mandato autonómico, María José Salgueiro, fue muy clara al proclamar el brillante futuro de esta Fundación, el 11 de febrero de 2010 en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, con motivo de la presentación de los actos de conmemoración del 1.100 aniversario del Reino de León bajo el eslogan “Raíces, 910 2010”. Entonces, ha subrayado Javier Chamorro, la consejera aseguró textualmente «que no se quede en eclosión efímera y sí, entre nosotros en ese afán de permanencia en el tiempo». En el citado discurso, María José Salgueiro inicidó en esta proyección de futuro porque su permanencia servirá para recordar que León fue cuna del parlamentarismo.

La Fundación carecía de plantilla ya que, como ha asegurado Javier Chamorro, todas las actividades corrían a cargo de él y de José Manuel Martínez, Oficial Mayor. Entre los planes de futuro de la Fundación estaba la preparación de los actos de conmemroación de de un siglo de existencia del Foro de León, eso sí en 2017 una fecha imposible de alcanzar ya que el futuro de la Fundación no se ve más allá de la próxima primavera.

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