El toque de campana triunfa en León
La plaza de Botines de León se convirtió esta tarde en escenario de la exhibición de toques protagonizada por campaneros de la provincia y de las vecinas Zamora y Palencia, que utilizaron campanarios portátiles para dejar constancia de su manejo de una práctica incluida en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.
La cita tuvo lugar como parte del programa del I Congreso Nacional de relojes, campanas y arte sonoro en el noroeste peninsular’ organizado por la Universidad de León (ULE), la Escuela de Arte y Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de León y Fundación Obra Social de Castilla y León (Fundos) en el que participan 70 personas llegadas de Argelia y de ocho comunidades autónomas españolas.
Mañana los participantes tienen prevista una salida práctica sobre relojes mecánicos y arte de campanas, que les permitirá visitar el Museo de los Pueblos Leoneses de Mansilla de las Mulas, el reloj concejil de la localidad de Santa Marina del Rey y el Museo del Tiempo de Astorga.
Expertos en patrimonio y conservación, campaneros, historiadores y aficionados se dan cita desde el jueves para poner sobre la mesa el potencial de desarrollo económico de estos objetos y prácticas. Así lo resaltó Jorge Martínez, codirector del Congreso junto a Daniel Sanz, quien aludió al “atractivo turístico que puede despertar este tipo de bienes que hasta el momento permanecían en el interior de muchas torres concejiles o iglesias parroquiales y que tampoco eran objeto de interés por parte del público en general”.
70 congresistas, alguno hasta de Argelia
“Consideramos importante poner en valor este tipo de manifestaciones, no solamente por lo que ha supuesto en la historia de los pueblos, en manifestaciones de arte civil y religioso, sino porque también todo este tipo de maquinaria estaba empezando a quedar en desuso y entendíamos que necesitaban de una urgente intervención” remarcó sobre una iniciativa que reúne a 70 congresistas llegados de Argelia y de ocho comunidades autónomas españolas en una cita de ámbito nacional que pone el foco en la presencia de este patrimonio en el noroeste peninsular.
La intención del Congreso es que este tipo de iniciativas contribuyan a que entidades públicas y privadas “pongan en valor, restauren y pongan al servicio de los ciudadanos este tipo de manifestaciones de tipo inmaterial que son muy necesarias y que, normativamente hablando, la próxima ley de Patrimonio tendrán que recoger obligatoriamente”.
Todo patrimonio, dijo, necesita una dotación presupuestaria para su mantenimiento y en ello radica una de las grandes dificultades que tienen tanto las asociaciones de campaneros como los responsables de entidades “que a veces dejan en último término este tipo de elementos”. “Consideramos que son una parte inherente a las estructuras arquitectónicas y que tienen que recuperarse y ponerse al día”, subrayó.
Entre los asistentes al encuentro, el campanero Jorge de Juan, de Villavante, recordó la tradición que mantiene viva la localidad y comentó que la asociación que la sustenta trabaja ahora para preservar el registro del toque del lobo, utilizado en zonas de montaña de la provincia y de cuya existencia tuvieron conocimiento con motivo de la inclusión del toque toque manual de campanas español forma en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco. “Estamos intentando guardar un registro por medio de personas mayores que todavía lo interpretan”, comentó.
