Patricia Cazón eleva en 'El largo invierno' el alma culturalista en época de ascenso

“Era mayo de 1994, yo acababa de cumplir catorce años y la Cultu bajaba a Tercera. Primer descenso de mi vida. Qué quemazón en el pecho, un año por delante en el que todos los días serían de noche. A mi padre le salió su primera cana en el bigote. Aún hoy, que lo tiene todo ya blanco, sería capaz de encontrarla, justo en el centro”.

Patricia Cazón (Zotes del Páramo, León; 1980) es la Reportera con mayúsculas. Y afronta en su último libro su historia personal con la Cultural y Deportiva Leonesa, que se convierte en la historia de todos los culturalistas desde que quedaron prendidos por el club con el nombre más bonito del mundo del fútbol. No es la Leonesa, no es la Deportiva: es la Cultural (y es mucho más a la vez). Esa 'Cultu' que tanto dolor les dió durante sesenta años y tanto placer les ha dado estos últimos años, tras aquel largo invierno después de tocar el cielo en Primera División a mediados de los cincuenta como cuentan los abuelos.

De su paso en las prácticas por el Diario de León a primeros de siglo a todos los periodistas les quedó claro que estaba hecha para escribir y para contar lo que ocurría alrededor suyo como pocos periodistas son capaces de hacer. Lectora empedernida (se la conoce como 'La Criticona') la pasión de esta periodista leonesa le llevó a escribir su primer libro –'Lágrimas de Arena: la historia de Aicha Embarek', 2004– sólo al ver por primera vez a los niños saharahuis llegando a León comprobando alucinados cómo caía el agua de los grifos. Hizo aquel reportaje y supo que tenía que escribirlo. La complicadísima historia de Aicha dio rienda suelta a una pluma imparable, que sabe como nadie mostrar el sentimiento que provoca cada situación; por dura que sea.

Y lo hizo. Tardó, mientras estudiaba el máster de 'El País' y colocaba algún que otro reportajazo en 'El País Semanal', pero lo hizo. Patricia Cazón es de esas escritoras que cuando lo siente dentro lo tiene que sacar. Luego vino otro de seguido –'Anecdotario', 2005– más de reportaje, casi como de compromiso por no dejar de escribir cuando venía de un tirón; aprovechando historias anecdóticas de personajes famosos como Ferrán Adriá o Kiko Narváez, Fernando Savater o Fermín Cacho. Y después, a bregarse en el 'Diario As' informando del Atlético de Madrid. Es normal que tras miles de libros leídos, y miles de páginas escritas volviera a la disciplina larga literaria, el libro, con su 'Hasta siempre, Vicente Calderón' en 2017, tras una sequía de doce años.

Y otra vez enganchada, en 2020 le tocó a su equipo del alma. El que tiene el nombre más bonito del mundo: la Cultural y Deportiva Leonesa. Cazón es una mujer de armas tomar, decidida y con una fuerza vital descomunal; que si se destapa da lo mejor de sí y en este 'El Largo Invierno' (Libros del K.O., 2020) habla de eso, de ser del mejor equipín del mundo... de una ciudad pequeñina que tiene a uno de los clubes Históricos del Fútbol Español (estuvo en Primera División en la temporada 1955-1956) y que ha sufrido como ningún otro las fases de ascenso y pasado por el infierno de la Tercera División en alguna que otra infausta ocasión.

De hecho 'El Largo Invierno' se refiere a esos tiempos en que una chiquilla culturalista por influjo de su padre, protagonista fundamental en un libro que es no sólo historia de la Cultural sino la evolución de ella misma temporada a temporada, ve cómo cae a la fosa más profunda y sueña con que cada año vuelva a ascender, y el libro termina precisamente con el fugaz ascenso a Segunda División de la temporada 2017-2018 que, a partir de este fin de semana, con el 'play-off exprés' podría volver a producirse el 26 de julio.

El libro que todo culturalista debe tener

Es un libro este de la cultural que tiene una prosa de una fuerza descomunal que muestra que no es baladí que eligieran a Patricia Cazón en el 'As' para cubrir la información del llamado 'pupas' de la Primera División; pasando por el Rayo Vallecano, primero (y por toda clase de deportes, que en una Redacción se entra para aprender desde abajo para llegar arriba). Porque está claro que hay que haber sufrido como nadie para poder entenderlo.

Y, por desgracia más que suerte, si hay un 'pupas' histórico en las categorías inferiores ese es esa Cultu que no ha logrado subir en fases de ascenso de grupos con 12 puntos; que una y otra vez se encontraba con inicios maravillosos e incomprensibles descalabros al final y que, por ser 'pupas' de verdad no llegó a ascender en una ocasión... por el número de corners tirados en una liga regular.

Pero es que ser culturalista es una forma de vivir, de soñar y de sufrir (¿Les suena?), pero en blanco. En ese blanco de la 'Cultu' que una vez encaló el estadio de la Puentecilla (el antiguo Antonio Amilivia) y que todo aficionado leonés tiene en el alma; y que por supuesto cobra especial importancia en lo que cuenta la periodista leonesa.

Especial atención muestra Cazón a las pequeñas cosas de este equipín que es tan grande que afecta al corazón de familias enteras, de jugadores, de una afición que pasa los largos inviernos pelando frío en las gradas pero con la ilusión de que todos los años va a ascender; porque es un equipo que lo merece por juego y por apuesta deportiva. Y blanco, muy blanco. La Cultural es blanca y señorial. Es el equipo del Reino. Del Reino de León, por supuesto, con un escudo de blanco-plata con un León Púrpura.

Es en suma un libro en el que Patricia Cazón va mostrando según va creciendo en edad cómo la Cultural y Deportiva Leonesa, una vez que te atrapa, no es que no te deje; es que nadie se quiere soltar. Y menos ella y los personajes que va mostrando, aparte de ser un sentido homenaje a un culturalista de pro como su padre, que se han visto involucrados en el devenir de este equipo de fútbol que atrapa. Sea para reír, llorar, enfadarse, alegrarse o lo que sea menester porque tiene algo especial que no sólo es el nombre de un equipo de fútbol más bonito del mundo (Cultural y Deportiva; y además leonesa) sino la perseverancia ante la dificultad. Y un histórico entre los históricos, que no es moco de pavo.

Y todo esto lo escribe 'la' Reportera leonesa en una colección de altísimo lujo de 'Libros del K.O.' llamada Hooligans Ilustrados, que pretende recuperar el formato periodístico para el libro, en la que en su plantilla se puede disfrutar a Manuel Jabois, Enric González, Nacho Carretero y Quique Peinado entre otros muchos cracks de las redacciones españolas hablando del deporte rey.

Un club pequeñín, pero que lo tiene todo

Es, en suma, un libro que va más allá de lo que es un equipo de fútbol en el que los verdaderos culturalistas pueden reconocerse en sus anécdotas y recordar aquellos momentos de ese largo invierno de descensos injustos y ascensos que nunca fueron; que, además, a cualquier otro que no conozca la historia de la Cultural le atrapa de tal forma que es bastante difícil que no se quiera hacer, inmediatamente, de la Cultu. No de la Leonesa, sino de la Cultu. Otros pueden decir que es más que un club, otros pueden decir que fueron los 'pupas' y otros pueden hablar de señorío.

Pero una vez se ha terminado 'El largo invierno', esta riada de sentimiento de aficionada y anécdotas, de contar la historia de ese fútbol de provincias donde un gol lleva a la gloria o a la desesperación y de saber que siempre, 'manque pierda', será uno de ese equipo blanco del alma. De leer el libro que todo culturalista debe de tener, con la potencia narrativa de Patricia Cazón y la increíble historia de la 'Cultu'...

...uno se da cuenta que el único equipo del mundo que tiene todo eso, y todavía puede seguir ascendiendo es el que es; el de la blanca esperanza siempre del ascenso para volver al cielo de la Historia. Pupas, sí; señorío también, y más que un club, pues más que un club de fútbol sólo puede ser el equipo de León: la Cultural (no digan que no es el mejor nombre del mundo del fútbol), del que uno es gane o pierda. ¿Les parece arriesgado decir eso de un club mezclando lo que más se conoce de todos los grandes? Hablen con cualquier culturalista para saber qué es ser de la Cultu. “Y más”, les dirá.

Pero ojo, advertencia: es muy difícil no querer ser de la Cultu una vez se ha leído a Patricia Cazón dándolo todo como la reportera de su vida (la de ella, la de su familia y la de la Cultural). Y eso, aunque no les guste el fútbol. Es un libro que según se comienza directamente atrapa y se lee con tanta intensidad que refleja cómo siente lo que tiene que sentir su autora según piensa en su 'Cultu' y la de todos. Una lectura que no es meramente deportiva, sino vital y que marca para siempre.

Si no se lo creen, léanlo y compruébenlo.

Es imposible no hacerse culturalista tras terminarlo. Y estar orgulloso de tener a la Cultu siempre en ese rinconcín del corazón que sólo uno de ellos sabe apreciar que existe para siempre, para bien y para mal; y para esperar siempre lo mejor pase lo que pase. Es un regalo para toda una vida.

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'El Largo Invierno'. Patricia Cazón. Libros del K.O. Colección Hooligans Ilustrados, 2020. 160 páginas. 'El Largo Invierno'