Quiñones admite que “las cosas no se han hecho correctamente” con el vallado de lagunas de Babia pero insiste en ejecutarlas
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, el leonés Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha admitido hoy que “las cosas no se han hecho correctamente” en relación al proyecto de vallado de cuatro lagunas con elevada figura de protección de la comarca leonesa de Babia, proyecto que provocó las críticas en la zona tras publicarlo ILEÓN.
Sin embargo, esa incorrección no supondrá que la Junta dé marcha atrás al polémico proyecto sino que el consejero la ciñó a falta de explicación a los pueblos afectados, porque “no se ha contado suficientemente con el territorio”, explicó en el Pleno de las Cortes ante preguntas del procurador de Unión del Pueblo Leonés (UPL), José Ramón García. Y por eso, el consejero se limitó a asegurar que “no se va a hacer nada sin la conformidad del territorio”, paralo cual avanzó una reunión la próxima semana con las juntas vecinales.
Suárez-Quiñones defendió la propuesta de vallado completo de las lagunas de Las Verdes, la Grande, la Recoleta y del lago Chao dentro del en el Parque Natural de Babia y Luna, insistiendo en que estos humedales sufren los efectos del aprovechamiento de los pastos por parte de la ganadería extensiva, así como de la fauna salvaje. Por eso, insistió en la obligación de hacer algo “rápido” para proteger las lagunas de los efectos de la “sobreexplotación”.
Suárez-Quiñones también insistió en apoyar la polémica medida del vallado con madera, asegurando que es habitual en Europa, junto al impulso en la zona de información sobre la zona y los valores protegidos. También garantizó la instalación de abrevaderos para los animales. Finalmente, abogó por hacer compatible la protección ambiental con la ganadería, que remarcó ayuda prevenir los incendios forestales y combate la despoblación, recordando que es justo ahora cuando urge ejecutarlo porque se dispone de una subvención europea.
Por su parte, García se felicitó por la decisión autonómica de “recapacitar y consensuar con los ciudadanos y ganaderos” de Babia la decisión de vallar las cuatro lagunas protegidas, pero reclamando que la Junta “debe fijarse más en otras problemáticas de la zona y sobre todo en el de la despoblación”. Por eso, remarcó que “es algo inconcebible” que con las verdaderas necesidades que hay en el Parque Natural de Babia y Luna se pretenda invertir estos fondos en esos vallados que, a corto plazo, “se convertirán en un residuo dentro del parque por la falta de mantenimiento”.
García alabó el trabajo del alcalde de Cabrillanes, Emilio Martínez, “que gracias a su insistencia consiguió que la institución autonómica recapacite para llegar a una solución en la que todos estén de acuerdo. Y destacó que las lagunas han convivido con respeto durante siglos la naturaleza y sus actividades agrícolas y ganaderas.
