A las puertas del invierno con una calefacción más incierta que nunca por su elevado coste

IES Obispo Argüelles de Villablino

Luis Álvarez

Con el mes de noviembre llegan las temperaturas semi invernales y las calefacciones vuelven a funcionar en toda la provincia leonesa de forma continuada al menos durante los próximos cinco meses. Un verdadero quebranto en este año de precios energéticos disparados, cuando no un descalabro, para las economías familiares, empresariales y de las instituciones.

Si el año pasado se comentaba “encendemos ya, o aguantamos hasta Los Santos”, este año el comentario en las casas es, “podemos encender ya, o esperamos otro mes”. Porque existen economías familiares que difícilmente van a poder soportar el coste de los sistemas de calefacción tradicionales (basados en carbón, gas natural y gasoil).

Los núcleos familiares con ingresos por debajo de los 1.000 euros tendrán muchas dificultades para disponer de calefacción durante esos cinco meses de frío más intenso y lo mismo se supone para los núcleos unifamiliares, con pensiones mínimas o de viudedad.

Motivos que deben alertar la diligencia y la atención de los servicios sociales, para no dejar a las personas más vulnerables sin la cobertura social adecuada. En los pueblos, la interrelación vecinal más sólida y arraigada, sirve en muchas ocasiones como escudo social, para los menos favorecidos o los mas necesitados de un apoyo.

Sin embargo, en los núcleos urbanos o semiurbanos donde la interrelación vecinal se diluye un tanto, es más posible que pasen desapercibidas algunas de las situaciones más críticas de necesidad. Resultaría penoso y dejaría muy entredicho nuestra fortaleza social, escuchar o leer en los medios de comunicación, que una persona o varias han muerto de frío. Todos seriamos corresponsables de esos hechos.

Los decretos de ahorro energético gubernamentales contemplan medidas para temperaturas máximas, pero no prevén como paliar el otro extremo, el de las temperaturas mínimas.

Las empresas y los espacios públicos se encuentran bajo esas normas que limitan las temperaturas máximas. De muy difícil control, por la variedad de espacios y de sistemas calefactores de los mismos, puesto que los hay que no se pueden regular con una llave, un regulador o un interruptor. Como ejemplo, el que se conoce muy bien en la montaña leonesa, el del carbón, cuyo encarecimiento ha sido tan importante como el del gas o el gasoil, situándose el precio actual de la tonelada entre 550 y 600 euros

Las aulas en Laciana no pierden temperatura este invierno

Los alumnos de Laciana al menos no pasarán frio en sus aulas este invierno, o al menos eso es lo que prometen tanto las autoridades autonómicas, la consejería de Educación, como las municipales, el Ayuntamiento de Villablino, que se muestran dispuestas a asumir los sobrecostes de las calefacciones en los centros educativos.

El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León ya autorizó en su sesión de 7 de septiembre a la consejería de Educación la contratación de los suministros de energía eléctrica y de gas natural para los centros docentes no universitarios (enseñanzas medias) para el año 2023, a partir del uno de enero, con un incremento respecto al año actual de más de 10,5 millones de euros, en previsión del encarecimiento de estas fuentes de energía

Los dos institutos de Villablino tienen sistemas de calefacción abastecidos por gasoil. Según ha podido constatar ILEÓN, con miembros de los equipos directivos, “normalmente en enero o febrero nos hacen un aporte económico extra a la asignación del presupuesto anual de principios de curso, para compensar los desvíos presupuestarios”. En ella es en la que se tendrán en cuenta estos encarecimientos.

En ambos centros, las calefacciones funcionan con normalidad y es previsible que los alumnos tengan mejor temperatura en las aulas que el invierno pasado, al no existir ya el protocolo Covid, que obligaba a ventilar las aulas cada hora. Y se cumplirán con normalidad las restricciones o normas que se impongan respecto a las temperaturas, por los gobiernos central y autonómico.

La responsabilidad de los centros de educación primaria e infantil, y por lo tanto quien asume los gastos de luz, limpieza o calefacción, entre otros, es de los ayuntamientos en los que se encuentran ubicados esos edificios. Motivo por el que, para saber como se asumen esos sobrecostes previstos para este año acudimos al Ayuntamiento de Villablino.

El alcalde Mario Rivas, a preguntas de ILEÓN, aseguró que está ya preparada una modificación presupuestaria “para llevar al próximo pleno”, con la finalidad de afrontar los sobrecostes del consumo eléctrico y de calefacciones, “no solo en los colegios, también en todos los edificios y servicios municipales”.

Preguntado si iban a plantearse algún tipo de restricciones, aseguró: “no, y menos en los colegios, ni nos lo hemos planteado, pero tampoco en el resto de dependencias municipales, más que las que se imponen desde el gobierno”, en referencia al cumplimiento del control de temperaturas máximas.

Y a continuación, reconoció que en los colegios esa medida de control, “es de muy difícil aplicación”. Puesto que, de los siete edificios escolares activos en el municipio, seis tienen calefacción de carbón y solo uno de gasoil, “lo que hace casi imposible el control estricto de la temperatura”.

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