El PP zanja sin informes la Comisión convocada para frenar las obras del Grano y anuncia la tercera fase
“La obra no se puede parar”. Es la frase literal pronunciada el pasado 17 de mayo en la Comisión Extraordinaria y monográfica de Urbanismo sobre el polémico proyecto de intervención la Plaza del Grano de León por boca de la concejala Ana Franco, cabeza visible de su defensa a ultranza del equipo de Gobierno del PP.
Y se ha aplicado nuevamente hoy, en otra Comisión monográfica que se había comprometido para un plazo de 10 días y que se ha celebrado 23 después. También se comprometió Franco a celebrarla con informes que respondieran a todas las peticiones lanzadas por los grupos municipales de PSOE, Ciudadanos, UPL, León en Común (IU), León Despierta (Podemos), pero estos dos últimos, los únicos que siempre han defendido abiertamente que no se ejecute el proyecto, denuncian que ni un sólo informe fue aireado hoy en respuesta a las críticas generalizadas a la gestión del equipo de Antonio Silván.
La concejala de Urbanismo, Ana Franco, junto al alcalde de León, Antonio Silván. / Carlos S. Campillo / ICAL
Las dos formaciones emitieron hoy una nota de prensa en la que recordaron que sus exigencias hace 23 días fue la inmediata paralización de las obras, reversión de la segunda fase garantizando la accesibilidad mediante reutilización de las losas y conservación del empedrado original, petición de información sobre qué se hará con el material que se está retirando, y el contacto con expertos en restauración, entre otras muchas. Su “asombro” es que hoy “no han dado contestación actualizada alguna”.
Lejos de contestar formalmente y por escrito, el PP ha dado una 'patada a seguir'. Y tanto Ana Franco como, sobre todo, el arquitecto Ramón Cañas que firma el proyecto, insistieron en vender las bondades de la fase que aún queda, la Fase III, que será la que afecte de lleno al empedrado tradicional de la plaza.
Asegurando, por ejemplo, que apenas se usará cemento -mortero bastardo-, salvo en las espinas maestras, dejando la tierra cruda para el resto de la superficie. Y admitiendo también que se elevará la cota actual del empedrado para nivelarlo a la altura de las aceras ya ejecutadas, hasta cerca de 20 centímetros en algunos puntos, pero comprometiendo cambios en los planes iniciales que mostraban una pérdida considerable del 'alomado' de los cantos rodados y el envenenamiento del típico 'verdín'.
Tanto el representante de Ciudadanos como de UPL insistieron, como hace tres semanas, en que se respete el valor patrimonial de la Plaza del Grano e insistieron en preguntar, sin éxito, si las fases I y II se estaban ejecutando tan cual se habían aprobado. Y por el Grupo Socialista, Evelia Fernández insistió en las dudas sobre la ejecución. Pero de paralizar la obra, nada.
Nuevamente León en Común y León Despierta fueron los más críticos. “Sin negarnos a que las vecinas y vecinos puedan acceder a sus domicilios, la accesibilidad nunca puede suponer la destrucción del Patrimonio al que se quiere acceder”, insisten en su nota de prensa, quedándose solos en la idea de que “no queremos que se acabe rápido, queremos que se haga de manera tradicional y respetuosa con la idiosincrasia que la ha convertido en la única plaza con este empedrado en Europa”, más si goza de diversas protecciones que de nada han servido, ya que se escucha a la Comisión Territorial de Patrimonio pero no a Icomos y otras organizaciones de patrimonio, muy críticas con el proyecto, su falta de información y su ejecución.
Pero no hay marcha atrás: ni se ha conseguido la presión suficiente hoy en la Comisión ni la semana pasada en el Pleno del Ayuntamiento, en el que la moción de ambos grupos críticos ni fue apoyada por los restantes de la oposición para su debate.
Mientras, el equipo de Gobierno del PP insiste en aducir riesgos de carácter jurídicos e incluso la posible pérdida de la cuantiosa subvención del Gobierno a través del 1,5% Cultural -casi 200.000 euros-, argumentos que ya habían salido a relucir en la primera de las comisiones extraordinarias del 17 de mayo.