Carrasco se resigna a pleitear por 133 hectáreas del Monte San Isidro pero no teme perderlas
La presidenta de la Diputación, Isabel Carrasco, se muestra resignada pero afirma no temer la posibilidad de que la Fundación Sierra Pambley ponga a la institución que ella preside en un severo aprieto por haber presuntamente incumplido la Diputación de manera reiterada la condición de dar un uso social a las 133 hectáreas del Monte San Isidro que fueron 'compradas' hace 65 años la Fundación, incumplimiento por el que Sierra Pambley reclama ahora una indemnización económica que prevé aquel contrato y que podría ser millonaria, o bien la recuperación de la propiedad.
Carrasco, preguntada por ileon.com a raíz de su exclusiva publicada ayer, aseguró hoy tajante: “No tememos nada”. Y explicó que la Fundación “es muy libre, como todo el mundo, de ir a los tribunales, ¿qué vamos a hacerle?”. Aunque a renglón seguido aseguró no tener conocimiento de que de momento la Fundación Sierra Pambley haya presentado una nueva reclamación, después de que en el Pleno del pasado mes de febrero la Corporacón rechazara sus alegaciones y, en una maniobra de intentar zanjar todo el proceso, al mismo tiempo alterase la calificación jurídica de los terrenos en cuestión para que pasen de bienes patrimoniales a bienes de dominio público.
Con esta maniobra bien parece que la Diputación trate in extremis, de hecho a toro muy pasado ya, de considerar que las 133 hectáreas son de uso público, como exigía el contrato firmado bajo presión del régimen franquista. La realidad es que jamás se construyó el Hospital Provincial previsto, y que acabó situándose en los Altos de Nava (su actual ubicación) y otra cosa incuestionable es que el Hospicio también previsto se ejecutó tarde y además cerró sus puertas a principios de la década de los años 90.
Desde entonces, la mayoría de esa enorme cantidad de suelo está ocupada por el Parque Monte San Isidro y también por servicios de la Diputación que bien poco, por no decir nada, sirven al uso público y social. Por ejemplo, el Parque Móvil de la institución o unos pabellones del complejo de San Cayetano cuya principal ocupación son albergar servicios administrativos de la Diputación, sumando unos 300 funcionarios aproximadamente.
Como ayer adelantamos, la reclamación de la Fundación Sierra Pambley podría, entre otras cosas, complicar el proyecto estrella conjunto del PP en la Diputación, el Ayuntamiento de León y la Consejería de Fomento de la Junta: la recién declarada Zona Natural de Esparcimiento de San Isidro, el pulmón verde de ocio de la ciudad, anunciado hace dos años pero del que ni siquiera se han concretado las inversiones ni los plazos.