Una campaña electoral entre papones, limonadas y torrijas
Llamamiento a las urnas para elegir presidente del Gobierno el 28 de abril de 2019. La fecha anunciada esta mañana por el actual jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, pone en marcha un calendario que hará que la campaña electoral coincida plenamente con la celebración de la Semana Santa leonesa, hasta el punto de que los partidos comenzarán a pedir el voto y pegar los primeros carteles en la noche del Viernes de Dolores, el 12 de abril, al mismo tiempo que recorrerá las calles leonesas la primera de las procesiones de los papones leoneses.
Los mítines y actos públicos de todas las formaciones se solaparán a partir de ese día con las habituales tradiciones de la Pasión leonesa, no sólo las procesiones sino otras de carácter más gastronómico y no menos típicas de León, como las limonadas o las torrijas.
Para cuando llegue el Viernes Santo, día central de la Semana Santa en León, el 19 de abril, se cumplirá la primera semana de la campaña oficial, que tendrá su cierre en el viernes siguiente, el 26 de abril.
Eso significa que de por medio también la campaña incluirá otro festivo que afecta a la provincia leonesa, el de 23 abril, día de la Comunidad de Castilla y León, más conocido en León como 'San Ikea' por la desafección que es más generalizada por parte de los leoneses a celebrar esta fecha de referencia autonómica y que suele ser mas aprovechada para viajar, por ejemplo, a Asturias.
Entre unas cosas y otras, el calendario electoral para las generales elegido por el Gobierno saliente, entre festivos y contando fines de semana, apenas dejará siete días laborables, y de hecho la mayor parte de este tiempo de mítines y actos concidirá con las vacaciones escolares con motivo precisamente de la Semana Santa.
El sábado 27 de abril será la jornada de reflexión y el domingo 28 el día de apertura de los colegios electorales de cuyas urnas saldrá la configuración del proximo Parlamento y por ende del próximo Gobierno de la nación.
Si es que hay mayorías claras. Porque hay que tener en cuenta que los posibles pactos postelectorales entre los partidos se verán seriamente condicionados por otra fecha muy relevante que llegará justo un mes después, el 26 de mayo: otra jornada electoral con tres votaciones de no menor importancia, elecciones municipales (para elegir los alcaldes de cada municipio), autonómicas (para conformar el próximo Gobierno de la Junta de Castilla y León) y Europeas.
