La credencial del peregrino

Sellos en una credencial del Camino de Santiago.

👉 Viene de la trigésimosegunda parte

La credencial oficial o más común es un tríptico de cartón en el que anotamos nuestros datos personales y que cuenta con unas pequeñas ventanas que vamos rellenando con los distintos sellos del Camino, algunos de ellos realmente bonitos. Aunque en la actualidad también encontramos distintos modelos expedidos por los países de origen de los peregrinos o por diferentes instituciones públicas. 

La credencial es el pasaporte del peregrino, el documento que demuestra los kilómetros andados y las localidades donde hemos pernoctado en la ruta, un curioso y útil diario de viaje donde descansan los numerosos y coloridos sellos que certifican nuestras paradas en el Camino. Podemos sellar nuestra credencial en numerosos lugares: albergues, ayuntamientos, colegios, universidades, iglesias, parroquias, catedrales, monumentos, oficinas de turismo e incluso en muchas de las cafeterías o restaurantes que nos encontramos en la ruta. Este salvoconducto es además indispensable para conseguir alojamiento en los albergues municipales y descuentos especiales para peregrinos en restaurantes y visitas a monumentos. Y finalmente exigido para obtener, una vez llegados a la meta, la Compostela. En definitiva, y aunque por supuesto el camino andado es algo que cada uno lleva en su interior, nos sirve para acreditar de alguna forma nuestra condición de peregrinos.

Esta credencial es muy fácil de conseguir, y solo tenemos que ir a cualquiera de las diferentes Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago que encontramos en casi cada ciudad importante de España o en algunas de otros países. Pero si nos olvidamos de hacernos con ella antes de empezar nuestra aventura tampoco tendremos problema para conseguirla en albergues, parroquias, oficinas de turismo o cofradías del Apóstol Santiago una vez iniciado el Camino, cuanto antes mejor, por supuesto. El precio de la Credencial varía de un lugar a otro, pero en cualquier caso nunca supera los 4 euros. E incluso en algunos lugares como albergues gestionados por Asociaciones de Amigos del Camino se puede obtener a cambio de un donativo.

La credencial digital

Una novedad instaurada para los Años Santos 2021 y 2022 fue la puesta en marcha de la credencial digital. Recordemos que, debido a la situación sanitaria provocada por el Covid, la Iglesia accedía por primera vez en la historia y de manera extraordinaria a celebrar dos años Jubilares seguidos.

Así, desde aquel 1 de enero de 2021 ya se puede gestionar este certificado digital a través de una app móvil. Al igual que sucedía con la credencial tradicional, también con esta nueva posibilidad el peregrino deberá conseguir los sellos diarios que acrediten su Camino. Aunque eso sí, en este caso lo hará a través de capturas de códigos QR. 

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