La liga Leb piensa en la Copa Príncipe

Urko Otegui intenta anotar ante la oposición de Calvo, Lucho y Mortellaro.

Prensa FEB

Cuando apenas quedan unos días para la disputa de las finales de la Copa Príncipe y Adecco Plata 2012, los técnicos Alejandro Martínez, Andreu Casadevall, Joan Peñarroya e Iñaki Merino se afanan en preparar la mejor de las estrategias para sorprender a sus respectivos rivales y alzarse con el título. Después de 5 meses de competición, las plantillas están rodadas y gran parte del trabajo hecho pero... ¿debe un entrenador contar con el factor estadístico e histórico para afrontar la cita? La gran mayoría de ellos le responderá que no, que el éxito está en el trabajo diario y en cómo llegue su equipo a la cita, pero hay una serie de datos y factores de gran importancia que podrían ayudar a decantar las finales hacia uno u otro lado y que nos pueden servir para tratar de despejar unas primeras incógnitas que tendrán su resultado final sobre las pistas de La Laguna y Andorra.

Estos son algunos de los números y datos más atractivos de cara a las finales:

El factor cancha, del calvario al éxito:

Por norma general, las competiciones Adecco son ligas tremendamente igualadas y localistas donde es realmente costoso imponerse a domicilio; ni siquiera ser líder destacado te garantiza la victoria en casa del colista más hundido. Una tradición liguera que no se cumple en las Copa Príncipe, donde el anfitrión tan sólo levanta el título en el 40% de las ediciones (6/15), y en la Copa Plata, donde las cifras suben ligeramente hasta el 45% (5/11). Si hacemos caso a la historia global de la competición los datos predecirían sendos triunfos visitantes del Ford Burgos y el Aurteneche Maquinaria pero.... ¿Y si atendemos a las cifras recogidas en los dos últimos años? En ese caso, Iberostar Canarias y River Andorra tendrían motivos para soñar ya que desde que se instaurara el nuevo sistema de partido único en 2009, el club local ha levantado el 100% de las Copas quedando las 6 disputadas en casa de Lucentum Alicante, Melilla Baloncesto, Palencia Baloncesto, Lobe Huesca, Blusens Monbus y CB Clavijo.

El campeón lo será por menos de 10 puntos:

O al menos así ha ocurrido en el 65 % de las ocasiones desde la temporada 1996/97, un porcentaje que se dispara en la Copa Adecco Plata donde el 82% de las finales se han resuelto por 10 puntos o menos (9/11) y que se estabiliza en la Copa Príncipe donde un 53% de las finales mantuvieron la emoción hasta el final. Un largo historial de victorias apretadas que tuvieron su mayor exponente en la Adecco Oro en la campaña 2004/05 cuando el Fuenlabrada se impuso a IBB Menorca por un único punto en un encuentro que se decidió con un tiro fallado sobre la bocina del menorquín Terrence Stewart. Para romper con la historia, Alicante Costablanca lograría hace tres campañas la mayor diferencia registrada hasta la fecha al imponerse en su feudo por 35 puntos al Melilla Baloncesto. El marcador más apretado, en este caso en Adecco Plata, tendría lugar hace tan sólo dos temporadas cuando el Lobe Huesca levantó el título en su cancha al derrotar al Huelva La Luz por un total de 22 tantos.

Los campeones serán inéditos:

Un total de cuatro equipos participarán en unas Copas Adecco que hasta el presente año han sido territorio virgen únicamente para un Aurteneche Maquinaria que debutaba esta temporada en el baloncesto profesional. Ambos finalistas de la Copa Príncipe saben muy bien lo que es disputar una final, eso sí, en una categoría inferior ya que tanto Iberostar Canarias como Ford Burgos fueron protagonistas de la Copa Adecco Plata con resultados dispares; el plantel canario perdió su única final ante Ourense en 2007 mientras que Ford burgos levantó dos trofeos consecutivos en sus dos únicas participaciones en los años 2005 y 2006, ambas lejos de El Plantío. En el caso del River Andorra, el club alcanzó el pasado año su primera final en la Adecco Plata cayendo derrotado en su visita al CB Clavijo.

El MVP de la Copa Príncipe será foráneo:

Así lo desvela la estadística que había repartido prácticamente a partes iguales los MVPs de las últimas 15 ediciones entre nacionales y foráneos. Un total de 8 galardones para los nuestros y de 7 para jugadores de fuera de nuestras fronteras que, además, el destino ha repartido de manera alternativa en los últimos años. Si el norteamericano Taylor Coppenrath fue el triunfador individual de edición 2010 de Melilla, y Alberto Corbacho el de la Copa celebrada en 2011 en Santiago de Compostela... 2012 debiera depararnos un MVP extranjero para mantener en alza dicha tendencia.

La historia toca a la puerta de Richi Guillén y Darren Phillip:

Ganar una Copa o alzarse con un MVP es sinónimo de hacer historia permaneciendo para siempre en la memoria de la competición; un futuro que comenzará a labrarse quien consiga un MVP inédito para la totalidad de participantes pero que podría suponer el complemento perfecto para los palmarés de dos de los jugadores con más solera de la Copa Príncipe, Ricardo Guillén y Darren Phillip. Tanto el tinerfeño como el neoyorkino saben muy bien lo que es dominar la competición, luchar por ascensos e incluso ser MVPs de la Liga Regular, pero si algo se le resiste tanto a Guillén como a Phillip, eso es la Copa Príncipe. En esta edición lucharán por llevar a lo más alto del pódium a sus respectivos equipos tratando de resarcirse de intentos fallidos en las filas de Los Barrios y CAI Zaragoza respectivamente.

Motivación doble: ganar la Copa, paso previo al ascenso:

Levantar a lo más alto del pabellón la Copa tanto en Oro como en Plata ayuda notablemente a lograr el ascenso de categoría al final de temporada. Un 67% de los campeones de Copa Príncipe (10/15) culminan el año en la ACB mientras que un 64% de los campeones de Copa Adecco Plata (7/11) logran llevar a sus clubes a la Adecco Oro. Si extendemos el dato a los finalistas del evento, un 70% de los equipos que juegan la final de Oro (21/30) ascienden, mientras que en Plata las posibilidades de ser finalista y subir son del 50%. Tan sólo dos ocasiones en la historia de la Adecco Oro, los dos finalistas de Copa consiguieron ascender de la mano a la ACB (13,3%), estos fueron el Baloncesto Fuenlabrada y el IBB Menorca en la campaña 2004/05 y el Blusens Monbus y el CB Murcia el pasado curso 2010/11. En Adecco Plata sucedió en dos ocasiones con el doble triunfo de Bilbao Basket y CB Tarragona en la 2001/02 y del Akasvayu Vic e Illescas Urban en la 2007/08 (20%). La historia reciente favorece por tanto a la Adecco Plata donde los campeones de los cuatro últimos años lograron ascender: Akasvayu Vic, Faymasa Palencia, Lobe Huesca y CB Clavijo. En el mismo periodo en la Adecco Oro tan sólo Alicante (2009) y Blusens Monbus (2011) lograron subir.

¿Qué sucedería si los campeones no lograsen el ascenso directo?:

Según reza la normativa de competición; “si el equipo vencedor de cada una de las Copas Adecco finalizara entre los equipos clasificados para participar en esta Fase, tendrá asegurado el segundo puesto de la Liga Regular, produciéndose en consecuencia la correspondiente colocación de puestos hasta el que obtuvo en la Fase Regular el Campeón de cada una de las Copas, enfrentándose siempre al peor de los clasificados, teniendo además ventaja de campo, siempre y cuando quede clasificado entre los cinco primeros al término de la liga regular”.

Etiquetas
stats