El Gran Premio de Motociclismo de La Bañeza homenajea a Ángel Nieto medio siglo después de su triunfo

Peio García / ICAL Los hijos de Ángel Nieto: Gelete (I), Pablo y Hugo; y su viuda, Belinda (D) descubren una placa

Ical

El quincuagésimo octavo Gran Premio de Motociclismo de La Bañeza vivió hoy un momento de especial emotividad durante el homenaje que se rindió a los expilotos gallegos López Mella y Dani Rivas y al recientemente fallecido Ángel Nieto, quien venció hace 49 años cuando compitió en la prueba. Un año después ganaba su primer título mundial.

Los hijos del piloto zamorano, Gelete y Pablo, desfilaron en un vehículo descapotable que acompañó la vuelta de honor dada al circuito urbano bañezano, antes de disputarse la segunda y última manga de la competición, con una moto Derby RAN, que pilotó en su día el malogrado Ángel Nieto.

El que fuera 13 veces campenón del mundo, aunque él decía que eran 12.+1, falleció el pasado 3 de agosto al no superar las heridas que le produjo un accidente de tráfico que sufrió días antes en Ibiza, a bordo de un quad.

Con decenas de miles de espectadores y casi dos centenares de pilotos en competición, el Gran Premio de Motociclismo Ciudad de La Bañeza incluyó este año como novedad una cuarta categoría en la prueba, Clásicas Superseries, que se sumó a las habituales Clásicas 2T y Clásicas 4T, junto a la carrera reina, el Gran Premio 125 centímetros cúbicos (Moto 3).

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