Partido loco, victoria para Montpellier (38-34)

Ademar plantilla Palacio balonmano

Diego Fidalgo

Primer encuentro del conjunto leonés en la Champions y primera derrota que suma el conjunto de Isidoro Martínez en un encuentro donde los leoneses no perdieron la cara al choque en ningún instante del mismo. El nivel de balonmano demostrado por los leoneses fue muy alto, el conjunto marista demostró que puede tutear a uno de los grandes equipos de Europa, pero en los detalles, los grandes equipos desequilibran un encuentro.

Partido marcado por la intensidad y la velocidad de uno y otro conjunto que en todo momento querían mostrar su gran bagaje ofensivo, pero jugando a meter goles el equipo que Karabati fue mejor que los leoneses que, con figuras como Cutura o Stronovski, se mostraron como los máximos anotadores del conjunto leonés.

El próximo sábado segundo encuentro de Champions esta vez en el Municipal de los Deportes de León con un conjunto ademarista que tendrán que hacer del Palacio una cancha inexpugnable para los rivales de esta fase de la Champions.

El primer encuentro de la Champions League en la temporada 2011-2012 se preveía complicado para los leoneses con el rival al que visitaban como era el conjunto del Montpellier. Los franceses son uno de los equipos que más han crecido en el balonmano del viejo continente en los últimos años.

Los leoneses llegaron con todos los disponibles al encuentro. El bagaje con el que se llegaba a Montpellier era de cuatro victorias consecutivas en liga Asobal, pero la Champions es diferente, como demostraría este encuentro dominical.

El partido arrancó con un Ademar muy lento y un Montpellier que desde el pitido inicial impuso un ritmo infernal al encuentro volcados al ataque con posesiones muy cortas para el conjunto francés. El primer parcial fue de 5-1 para los locales, mientras que Ademar logró reponerse en poco tiempo y no dejarse ir en el marcador. Un parcial de 2-4 provocó que los de Isidoro volvieran al partido.

A partir de ese momento el partido entró en la sexta velocidad, un encuentro donde los contraataques se convirtieron en la principal jugada de ambos conjuntos. Permitió ver un partido muy atractivo para los espectadores del encuentro. Muchos goles en uno y otro lado. Los franceses no dejaban que los leoneses se acercaran, pero superados los primeros veinte minutos de partido, tras un parcial 0-3 para Ademar los de maristas pusieron el empate a 15 goles.

Inmediatamente después de este empate el conjunto del Montpellier volvió a imprimir ese ritmo endiablado al partido que permitió que en la primera mitad se hubieran anotados 37 goles. En los últimos minutos, Ademar volvió a meter intensidad y con un gol de Denis Krivoschlikov de penalti cuando habían terminado los primeros 30 minutos reflejaron el marcador de Montpellier 19 - Ademar 18. Al descanso Martin Stranovski era el máximo anotador de los leoneses con 6 goles.

La continuación del encuentro siguió con gran intensidad, lo que preocuparía al nivel físico con el que se podría llegar a los últimos minutos del encuentro. Pero poco a poco, la intensidad del partido fue bajando enteros. Karabati seguía demostrando que era uno de los grandes jugadores de balonmano del planeta. Jugadas individuales y tiros imposibles mostraban la calidad de Karabati.

El ritmo se volvió a incrementar y el primer parcial de la segunda parte fue de 23-20, a lo que Ademar logró responder, pero Montpellir siguió metiendo la directa y colocó un 26-21, como máxima diferencia para los locales en la segunda parte. Ademar, de nuevo, redujo diferencias poniendo un parcial de 0-3, lo que supuso volver a estar en partido.

El partido era de ida y vuelta, de gran intensidad y velocidad. Los franceses disputaban un gran partido, pero los de Isidoro Martínez no se iban a rendir. Pese a que el conjunto local llegaba a la portería leonesa en cinco segundos, los leoneses jugaban sus bazas para no perder sus opciones en el partido.

De nuevo en el ecuador de la segunda parte los franceses abrían ventaja para lograr de nuevo seis goles de renta con un marcador de 30 a 24 para el Montpellier. Isidoro pedía tiempo muerto y solicitaba no perder balones porque cada perdida suponía un gol en contra, del mismo modo, pedía una mayor intensidad defensiva.

En este momento, el conjunto francés aumentó la intensidad defensiva con un 5-1. El avanzado del equipo francés molestaba la circulación de balón de los leoneses. Así se llegaba al minuto 20 de la segunda parte con el resultado de Montpellier 33-Ademar27. Parecía que Ademar no tendría oportunidad de luchar por la victoria en los últimos diez minutos de encuentro.

Cuando parecía imposible, Ademar logró un parcial 3-0 que permitió situarse con un 35 a 31, distancia muy importante, pero los maristas no querían perder la cara al choque en los últimos cinco minutos del encuentro.

Karabati con seis goles se empeñaba en que Ademar no tuviera ninguna opción para llevarse la victoria. Pese a que los de Isidoro lo intentaron no lograron llevarse la victoria en el encuentro. La derrota en tierras francesas llegó para el conjunto leonés, pero dando muy buena imagen ante uno de los grandes equipos de Europa.

Al final del partido el resultado del encuentro fue de Montpellier 38 - Ademar 34. Partido de muchos goles, que no benefició al conjunto leonés pese a demostrar un gran nivel de balonmano.

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