Mastines, 'pandeiros' y 'manteiga' protagonizan la agenda de ocio del fin de semana en la comarca de Laciana
Durante el primer fin de semana de agosto las ofertas de ocio y diversión son variadas en la comarca de Laciana. Mastines, 'manteiga' y 'pandeiros' serán los protagonistas desde el 2 al 4 de agosto, buscando la atención de originarios y foráneos en Villablino, Sosas y Caboalles de Abajo, respectivamente.
El sábado día 3 de agosto las convocatorias son en Villablino, con el Campeonato Nacional de Mastín Español y en Caboalles de Abajo con la II Xuntanza de pandeiros y a panderetas. Ambas citas son de jornada completa lo que permite dedicar la mañana y una y la tarde a la otra.
Los mastines
El concurso canino es ya un clásico de Villablino que cada primer fin de semana de agosto, desde hace 12 años, celebra la prueba de Laciana puntuable para el Campeonato Nacional de la raza.
Desde primera hora, a las 9 horas comienza la recepción de animales en la plaza de Luis Mateo, frente a la Casa de la Cultura, donde se desarrolla, sobre el denominado ring, el paseo, exhibición y puntuación de los animales en las diferentes modalidades.
Se espera que, como cada año, el número perros inscritos esté en torno al centenar, con lo que convierten a la cita de Villablino en una de las más concurridas del campeonato.
Para el público se monta un graderío auxiliar en el borde sur del recinto, aunque la mayor atención se centra en el paseo entre los perros que esperan su turno de concurso. Los animales, sentados o tumbados tranquilamente, entre y bajo los árboles del parque que rodea la plaza, protegidos del sol, que también es una clásico por estas fechas ofreciendo a los visitantes un espectacular lugar donde fotografiarse con los perros y poder apreciarlos en proximidad.
La entrega de premios pone fin al certamen ya bien entrada la tarde. En un concurso que este año contará con Juan Carlos López González como juez. Organizada la prueba puntuable de Villablino por la Asociación de Criadores de Laciana de Mastín Español (ACLAME), con la autorización y aval de la Real Sociedad Canina de España y la Asociación Española del Perro Mastín Española (AEPME), que son las organizadoras del concurso nacional.
Los pandeiros y panderetas
También el sábado, en el patio del colegio La Devesa de Caboalles de Abajo desde las 12 horas comienzan a concentrase los percusionistas, que se dan cita en este día para disfrutar de sus aficiones musicales. Compartir y comentar sus experiencias, disfrutar de las interpretaciones propias o de las de los otros, demostrar sus técnicas y habilidades, además de lucir las peculiaridades de sus instrumentos.
Varias actuaciones de grupos ya consagrados como Las gaiteras de Zerréu (Asturias), los músicos y danzantes del grupo La Payetsa, el grupo Panderetas compañeras (Asturias), el grupo de acordeones Clave de Sol, las hermanas Laura y Amanda, Carmen Marentes y Yoli García, José Manuel Sabugo o el grupo Xaleu.
Son toda una garantía de calidad y variedad en las actuaciones, para llenar la jornada de sones de amable tradición que, si hubo días que les llamábamos de antaño, son hoy parte de una actualidad cultural local, que busca ahondando en sus propias raíces la autoafirmación necesaria para asumir el cambio social que está experimentado.
No solo habrá música en el programa. Coloquios en patsuezo, explicaciones sobre los distintos tipos de panderos, un reconocimiento a la “Sociedad San Miguel de Bailes y Costumbre de Laciana”, gran impulsor hace ya más de cuarenta años de la recuperación de las tradiciones culturales en el occidente leonés (música, bailes, indumentarias, lenguaje, tradiciones).
Como nunca pude faltar en cualquier celebración de tradiciones en Laciana y en León, comidas. Hasta hubo tiempos en que había comidas para las honras fúnebres. El pago de las comidas, de precios populares, lleva un sobrecargo de tres euros para ayuda a la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer local (AFADLA).
Una comida popular, fisuelos, chocolate, sopas de ajo y por supuesto cena, son el alimento indispensable para aguantar la jornada sin desfallecer y poder participar en los actos musicales y de baile conjuntos para todos los participantes, que van a completar parte de la tarde del sábado.
Estas jornadas sirven además para una convivencia nada forzada, con los vecinos más próximos de Asturias, con los que Laciana comparte cultura popular, tradiciones y también muchos lazos familiares entretejidos durante años, que hacen más fuerte esa unión que supera fácilmente los límites impuestos por la orografía.
La 'manteiga'
Es la tercera cita del fin de semana, la denominada 'Fiesta de la manteiga' en Sosas de Laciana, esta ya para el domingo, en la que se podrá degustar el producto estrella de la convocatoria la mantequilla ('manteiga'). Desde primera hora, a las 12 de la mañana, que está previsto el comienzo de la programación.
Todas las actividades se concentran en la gran carpa de un conocido establecimiento de restauración del pueblo, que les permite el uso de sus instalaciones, con la finalidad de proteger del sol a los asistentes. Que en las primeras horas tendrán dos talleres de participación: “Dibujos con mantequilla” y “juegos tradicionales”.
Un aperitivo de medio día antes de comer, amenizado por el pandero y la pandereta de Xara y Amanda, dos vecinas aventajadas del pueblo, junto al gaitero leones Xicu y después, la comida con pulpo y churrasco como menú del día.
Para la tarde nuevas actuaciones musicales, el folk de Héctor y Leti, las interpretaciones del grupo femenino de música tradicional avilesino Caparines y los bailes regionales del grupo La Payetsa. Todo esto antes de la cena.
Quedando para el final la celebración del Madreña Fest. Un concurso en el que los de casa, se sobreentiende los vecinos de Sosas, juegan con ventaja. Porque la mayoría de ellos tienen en sus casas y usan con bastante asiduidad las madreñas, que no se suelen llevar colgadas del hombro cuando se va a una fiesta.
Ya que el certamen que se propone es un concurso de bailes de salón calzados con las tradicionales madreñas, que provocará más de un traspiés, bastante diversión y risas entre los participantes y el público. Una buena forma de terminar una jornada festiva.
