UPL exige la disolución de la nueva Fundación Siglo que sólo apoya a Valladolid
La Unión del Pueblo Leonés ha anunciado este lunes que solicitará a la Diputación Provincial que acuerde demandar al Gobierno Regional la inmediata anulación de la nueva fundación Siglo, surgida de la fusión de ésta con Sotur, ambas empresas bajo sospecha por total opacidad en sus cuentas, y que, además, sólo cuidan de los intereses de Valladolid.
Tal y como ha insistido el presidente de la formación leonesista, Javier Chamorro, lo único que hace es invertir en Valladolid y ha puesto como ejemplo el gasto de esta fundación en todas las actividades del auditorio Miguel Delibes a razón de cuatro millones y medio de euros al año, mientras que aquí es el Ayuntamiento el que abona estos gastos del Auditorio Ciudad de León.
No es posible que tanto Siglo como Sotur cuenten con más de cien empleados en Valladolid mientras que en León no se sabe muy bien ni cuántos hay ni qué hacen, más allá de abrir varias iglesias de la ruta Jacobea durante los meses de verano y poco más.
Diputación
A este listado de diferencias, como que la Junta paga los gastos del auditorio de Valladolid mientras que este gasto lo abonan los ayuntamientos en el resto de las capitales de provincia, Chamorro y el procurador leonesista Alejandro Valderas añaden el centenar de integrantes de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León.
Además de demandar a la Diputación Provincial que exija la disolución de la nueva fundación, el diputado provincial Lázaro García Bayón presentará la moción, la UPL ve imprescindible que se deriven los recursos que se gastan estas fundaciones en todo menos en León hacia el Patronato de Turismo Provincial.
Javier Chamorro ha señalado que esta operación es imprescindible para frenar el descenso continuo de las cifra de pernoctaciones y turistas que nos visitan, mes a mes, y que están machacando a un sector básico para León como es el turismo mientras, por ejemplo, tal como ha explicado Alejandro Valderas, la Junta se gastan ingentes cantidades en promocionarse dentro de la Comunidad.
Para Alejandro Valderas todas las grandes sumas que se consignan a estas fundaciones son una triquiñuela “son una farsa para pagar los grandes agujeros de sociedades públicas como Gesturcal de la que, como en el caso de la Fundación Siglo y de Sotur, se desconocen el estado de sus cuentas desde hace años.
