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UGT denuncia que Adif impone el traslado forzoso de trabajadores a otras comunidades
UGT denunció hoy que Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) ha impuesto el traslado forzoso de 75 trabajadores de Castilla y León a otras comunidades. Éste es uno de los motivos por lo que el sindicato apoya la convocatoria de huelga general de 24 horas entre el 31 de julio y el 1 de agosto, si bien se ha desmarcado del paro previsto en Renfe por CCOO, CGT y el Sindicato Ferroviario.
El secretario estatal del sector ferroviario de UGT, Ángel Ruiz, y el responsable autonómico, Felipe de Diego, expusieron hoy los cinco problemas que tienen sobre la mesa los sindicatos por lo que reclamaron al operador que busque un acuerdo con la representación social. “El diálogo no cuesta absolutamente nada”, apostilló Ruiz, quien agregó que las reivindicaciones no son económicas y señaló que la huelga supondrá el “fracaso” de las conversaciones. Además, lamentó los problemas que puede generar a los ciudadanos, ya que coincidirá con la segunda operación salida del verano.
En ese sentido, el dirigente estatal explicó que Adif ha planteado el movimiento “forzoso” de 415 trabajadores, de una plantilla de 13.500. De ellos, el 25 por ciento, 100, pertenecen a Castilla y León, si bien la empresa solo pretende ofertar vacantes para 25. En provincias como Valladolid se verán afectados un total de 21 empleados, según detalle De Diego.
El segundo de los puntos del conflicto tiene que ver con las inspecciones visuales de los vagones, una tarea que Ruiz explicó que realizaban operarios de Renfe, con categoría de visitadores, y que la empresa pretende encargar a personal de Adif de nivel tres, el más bajo. Recalcó que es una tarea importante para garantizar la seguridad de las circulaciones ferroviarias. También, UGT pide una solución para los 1.350 trabajadores dedicados a la venta de billetes de Renfe, cuyos empleos peligrarían con la liberalización del sector y la llegada de operadores privados en corredores, como el de Levante.
Otro de los problemas se refiere a la gestión de las terminales de carga. Aseguró que Renfe y Adif aplican diferentes políticas, si bien el administrador de infraestructuras ha optado por el modelo de “riesgo y ventura”, que supone dejar en manos de una empresa privada los asuntos vinculados con los trabajadores y la comercialización de los servicios. Para los trabajadores afectados, UGT exige que se mantenga su convenio y categoría.
Por último, el secretario estatal del sector ferroviario de UGT alertó del cierre de 300 bases de mantenimiento de la vía. De ellas, 30 o 35 son administrativas, si bien el resto realiza tareas directas de gestión de la infraestructura. Según el 'ugetista' Ángel Ruiz Adif pretende suprimir 74 bases con menos de tres trabajadores. En definitiva, el dirigente sindical reclamó un gran pacto de estado sobre la política ferroviaria para evitar cambios de modelo por la llegada de un nuevo gobierno.
En total, Adif emplea en Castilla y León a 1.668 trabajadores en los centros de trabajo de Ávila (76), Valladolid (341), Salamanca (133), Zamora (65), Segovia (33), Soria (51), Burgos (355), León (455) y Palencia (150).
Renfe
Por otra parte, el secretario estatal del sector ferroviario de UGT rechazó que su sindicato se haya descolgado de la convocatoria de huelga en Renfe, coincidiendo con el paro de Adif. Ángel Ruiz expuso que el Comité General de Empresa del operador no apoyó la protesta, por lo que justificó que su organización no se sume a las medidas adoptadas por la CGT, CCOO y el Sindicato Ferroviario. Además, señaló que no existe una “cerrazón” a la negociación por parte de la compañía y que los problemas se van solucionando “día a día”.
No obstante, el dirigente sindical reclamó que los 850 empleos que necesita Renfe hasta 2017 se contraten con las condiciones y salarios de la compañía y no a través de empresas intermediarias. “Este es el litigio, pero no suficiente para la huelga”, sentenció.