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Paradores vuelve a encargar la reforma de San Marcos por tercera vez en los últimos años

Paradores vuelve a sacar a contratación la redacción de un plan integral de reforma de las instalaciones del Hostal de San Marcos, uno de los buques insignia de la cadena hotelera pública y el de más lujo de los ubicados en la ciudad de León. La nueva intervención propuesta pasará por la mejora y adecuación de la zona noble, así como la intervención en el claustro, y la demolición de la edificación nueva (de la década de los 60) para levantar de nuevo un complejo en el que repartir 180 habitaciones, 12 salones para bodas y convenciones, restaurante en la planta baja junto al río, cafetería, spa y piscina. Unas piezas que debe encajar el estudio de arquitectura que se haga con el encargo de redacción y asistencia técnica de los planos, que firmarán una obra con un presupuesto de entre 40 y 42 millones de euros, según publica en su edición de hoy Diario de León.
Se trata de la tercera intentona en los últimos años de reforma del Parador de San Marcos. La primera fue bajo el Gobierno de Zapatero en su segunda legislatura y con el leonés Miguel Martínez como presidente de la sociedad pública. Una reforma que los recortes del Gobierno de Rajoy echaron abajo totalmente. La nueva dirección de Paradores intentó entonces una reforma parcial, cuya adjudicación de proyecto acabó en los juzgados con una gran polémica, una opción que ahora también queda en el olvido.
El nuevo plan se encuentra ya en la fase de selección del proyecto de reforma y dirección de obras, a partir de las ofertas presentadas desde el pasado día 2 de julio y hasta el 15 de septiembre por los estudios de arquitectura interesados. El encargo, que parte con un presupuesto base de licitación de 1.452.000 euros, se concretará antes de final de año y contará a partir de entonces con nueve meses para la entrega del proyecto: tres meses y medio para el básico y cinco meses y medio para el de ejecución. Un calendario que, en el mejor de los casos, emplazaría el comienzo de las obras para finales de 2016.
La decisión de plantear la reforma integral se da después de anular el concurso de redacción abierto a primeros de año, en el que tan sólo se apuntaba el acondicionamiento del edificio histórico. Una intervención que “no daba cobertura” a las intervenciones de reforma necesarias, según se cita en los pliegos de contratación, que dividen las actuaciones en función de los edificios del complejo y señala que se deberán eliminar las barreras arquitectónicas, hacer un plan de eficiencia energética y cambiar casi todas las instalacuiones de servicios.
En el edificio noble se procederá a la “mejora y adecuación” por medio de “la incorporación y uso de habitaciones”, sobre todo “las que miran al río”, en las que se adecuará la “distribución y superficie a las exigencias de la normativa”. Los pliegos señalan que se deben construir alrededor de 40 habitaciones singulares, salón de clientes alojados y restaurante en la planta baja junto al Bernesga con acceso independiente desde el exterior. Unos trabajos que se completarán con la intervención puntual en el claustro renacentista y la recuperación del patio de zona sur.
Mayor será la actuación en la edificación nueva. Los pliegos recogen que el estudio debe plantear un proyecto a opartir de la demolición de este inmueble, que es el que queda ahora en la prolongación de la entrada trasera, y su “reconstrucción” con las mismas alturas y la “integración de las terrazas a las habitaciones”, además de inclusión de “la zona de spa y la piscina” y “salones diáfonos en la planta baja comunicados con los jardines”. Ahí irán también la mayoría de las 180 habitaciones —cuatro suites, diez junior suite y 166 estándares—, la concina, los servicios y 12 salones: tres de convenciones de al menos 500 metros para bodas y eventos, un auditorio de 300 metros, uno de 200 metros para reuniones, tres de 150 metros para “reuniones/auditorio” y cuatro salones de 60 a 80 metros cuadrados para reuniones, de los cuales se da la posibilidad de que uno se instale en el edificio antiguo.