La oleada de incendios en Asturias comienza a remitir

Tras una noche en vela, en la que las llamas iluminaron el cielo del occidente y de otros muchos puntos de la montaña asturiana, la oleada de incendios comienza a remitir. Al menos, los más conflictivos ya están bajo control y el número total de focos, que llegaron incluso a la rasa costera, desciende poco a poco. La lluvia que comenzó a caer de madrugada, el viento del sur que suavizó sus ráfagas y la actuación de los vecinos y los efectivos de bomberos ha logrado meter en cintura el fuego. Pese a la alerta, no fue necesario evacuar a nadie en la zona del suroccidente y de los evacuados en las poblaciones de Viavélez, San Juan y La Rebollada (Caridad) solo cinco fueron realojados en un hotel, uno de ellos porque su casa se ha visto afectada y el resto por precaución. Los 30 restantes que habían salido de sus casas y que se habían reagrupado en el polideportivo de Lóngara decidieron de madrugada pasar la noche con amigos o familiares. Las comunicaciones con Galicia, que en un principio tuvieron que ser cortadas por la amenaza de las llamas y por la intensa humareda, quedaron restablecidas por la noche.
El último balance realizado por el Servicio de Emergencias del Principado habla de alrededor de 102 incendios forestales activos, de los cuales 34 están controlados y con frentes de menor intensidad que los registrados en la noche del sábado al domingo. Además, la tendencia es descendente. Esto quiere decir que comienzan a extinguirse focos y otros están bajo control. El punto más conflictivo continúa en el concejo de El Franco, que es donde están centrando sus esfuerzos tantos los bomberos de Asturias como el Ejército, a través de la UME (Unidad Militar de Emergencias). Esta unidad ha adelantado que esta mañana tiene desplegados 98 efectivos en el Principado del Batallón de Intervención de Emergencias (BIEM) V. En el suroccidente, la situación también está bajo control y, finalmente, no ha afectado a bosques ni terreno protegido. El único punto caliente al mediodía estaba en la zona de Mieldes-Tabladiello, en Cangas del Narcea. La labor de los helicópteros que han podido despegar a primera hora de la mañana, junto con los bomberos y los militares, está siendo esencial.
También hay un balance de daños materiales. El fuego ha destruido en El Franco una vivienda habitada y otra restaurada en la localidad de Hervedeiras, además de una vivienda habitada, un cobertizo y un tractor en Riubón, un pajar en San Juan de Prendonés, una cuadra en Loudeiros, un cobertizo y otra vivienda abandonada en San Julián. En el concejo de Boal, resultaron calcinadas dos viviendas abandonadas en Cabanas y otra casa abandonada en Vega de Ouria.
Efectivos y meteorología
La situación ha mejorado pero el Principado de Asturias mantiene activo el Plan de Incendios Forestales del Principado de Asturias (Infopa), en situación dos, desde el sábado a las nueve de la noche. En total, la batalla contra el fuego la están librando más de 230 efectivos, además de los ya citados de la UME y de agentes de la Policía Local de los concejos afectados y agentes del medio rural.
Las primeras gotas caídas en el occidente asturiano alrededor de la medianoche fueron recibidas como un maná. Fue la primera señal de que la meteorología comenzaba a ponerse de parte de los centenares de efectivos y vecinos que luchaban contra las llamas. Poco después aflojaba el viento del sur. El alcalde de Cangas del Narcea, José Víctor Rodríguez, ha explicado que en menos de una hora “el panorama cambió drásticamente”. Al menos, en el suroccidente pasaron de tener focos descontrolados y de gran intensidad, sobre todo en la zona de Bimeda y Besuyo, a respirar aliviados. De hecho, cuando los efectivos de la UME llegaron al concejo, alrededor de la una y media de la madrugada, la situación ya estaba más controlada y decidieron seguir camino hacia el Franco, donde se tuvieron que concentrar todos los esfuerzos.
Superficie quemada
Aún parece pronto para saber qué superficie ha podido quedar arrasadas por las llamas. Las primeras estimaciones hablan de unas 3.500 hectáreas. Es cifra, han apuntado desde el Ayuntamiento de El Franco, es la que barajan los efectivos sobre el terreno. La concejala de Cultura, Victoria Zacero, calcula que tres cuartas partes del municipio están calcinadas. Sin embargo, desde el Servicio de Emergencias reclaman prudencia con las cifras. Precisan que ahora la prioridad es la extinción total de los incendios y que después llegará el momento de valorar. Los helicópteros centran sus esfuerzos en acabar con los fuegos. Tan solo el destinado a rescates, que no ha tenido que actuar, ha comenzado a perimetrar los fuegos que ya han sido sofocados.
Una vez controladas las llamas, existe una segunda prioridad: conocer la autoría. El presidente del Principado de Asturias, Javier Fernández, que este domingo se ha desplazado hasta El Franco, ha destacado que el centenar de incendios del occidente comenzaron de forma simultánea, por lo que la prioridad fue actuar con rapidez para evitar la propagación. Fernández ha calificado de “realmente increíble” que pudieran iniciarse a la vez más de cien fuegos. A su juicio, “parece imposible” que fuese un hecho fortuito, aunque precisa que es necesario abrir una investigación antes de sacar conclusiones. “Una vez que se solucione eso será a otros a quienes corresponda determinar el origen de esos focos”, ha dicho mientras oteaba los 17 kilómetros quemados entre la sierra y Viavélez. El presidente ha agradecido el trabajo de todos los profesionales que se han involucrado de forma directa en sofocar el fuego y proteger a la gente.
Más adelante, también llegará el momento de hablar de indeminizaciones. El presidente del Gobierno asturiano ha adelantado que el Principado evaluará las pérdidas una vez erradicado el riesgo y actuará dentro de sus competencias a la vez que pedirá ayuda al Gobierno central para intentar paliar, entre todos, “los daños producidos”.