Un nuevo semáforo en el Espolón intenta regular el caos que provoca el 'embudo' hacia el barrio de San Mamés

El acceso temporal de tráfico por la calle Fernando I ha provocado serios problemas en la zona.

Redacción ILEÓN

Las obras de peatonalización de la zona aledaña a la muralla de León en las calles Carreras y Los Cubos, que supusieron el fin del tráfico rodado por ellas, hace meses que ha convertido en un complicado y peligroso embudo el acceso rodado temporal que el Ayuntamiento de León habilitó entre la plaza del Espolón y los barrios de La Palomera y San Mamés de la capital.

Ese embudo se ha provocado al abocar a todo el tráfico desde el Espolón a través de la pequeña calle Fernando I, atravesando para ello un de los pasos de peatones más transitados de la ciudad, el que obligatoriamente los peatones tienen que utilizar para acceder hacia o desde el poblado barrio de San Mamés en relación con el centro de la ciudad.

Una situación que especialmente se complica más en horarios de entradas y salidas de centros escolares próximos, como el Colegio Maristas y que, por si faltaba algo, también colisiona con la ejecución paulatina en esta zona del futuro nuevo trazado de la Ronda Interior, incluidos derribos de varias casas expropiadas.

Ante tal cúmulo de problemas, el Consistorio trata ahora de poner una solución temporal en este punto y lo hace instalando semáforos que ya regulan desde hace días el paso alternativo de vehículos y de peatones. De este modo, a partir de ahora unos y otros dispondrán de un tiempo establecido por las señales luminosas para no provocar por ejemplo las larguísimas colas de coches en horas punta por el hecho de tener que respetar la prioridad delos viandantes en lo que hasta ahora era sólo un paso de peatones. Colas que a la postre bloqueaban la glorieta que es el Espolón con decenas de vehículos parados, bloqueando así todos los accesos posibles, tanto a la avenida de Nocedo como a Álvaro López Núñez o al Casco Histórico por Puerta Castillo.

A partir de ahora, por lo tanto, los peatones tendrán que mantenerse sin cruzar el tiempo que dicta el nuevo semáforo, dejando así una mayor fluidez en el caso de los vehículos sobre todo hacia la calle Fernando I, en la confianza de que esto acabe resolviendo en la mayor parte del tiempo los problemas acumulados durante meses.

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