La Junta alerta de la detección del vuelo de la plaga del barreno de los frutales en El Bierzo
La Estación de Avisos Agrícolas de la Junta de Castilla y León ha alertado de la detección en la comarca del Bierzo del vuelo de la plaga del barreno o carpocapsa de los frutales, un lepidóptero cuya larva hace galerías en el interior del fruto de manzanos y perales, el mismo insecto que produce el agusanado de las nogales. Según informó la Junta a través de un comunicado, la estación de avisos hace un seguimiento de la evolución de esta plaga, mediante trampas de feromonas.
En las últimas semanas se ha detectado el vuelo de la población de adultos de la primera generación de este año, que son quienes realizan las puestas de huevos de los que nacen las larvas que posteriormente barrenan los frutos. Por lo tanto, es “el momento adecuado” para dar un tratamiento contra esta plaga, ya que el crecimiento de los frutos va muy avanzado, tanto en peral como en manzano.
Para ello, se recomienda aplicar un tratamiento larvicida, que controle también las larvas de 'Cacoecia pronubana', otro lepidóptero que puede hacer daños en las hojas y en la superficie del fruto, y del que hay un nivel de población moderado este año. Las materias activas larvicidas recomendadas son 'bacillus thuringiensis', 'betaciflutrin', 'clorantraniliprol', 'fosmet', 'metoxifenocida', 'tebufenocida', 'tiacloprid', virus de la granulosis, que son admitidas en producción integrada.
El 'bacillus thuringiensis', la confusión sexual y el virus de la granulosis son autorizados en agricultura ecológica. El sistema de confusión sexual debe ponerse al inicio del vuelo para que sea eficaz y consiste en disponer numerosos difusores de feromonas distribuidos por la plantación frutal. La feromona es la sustancia química que emiten las hembras para atraer a los machos. Al poner numerosos puntos artificiales de emisión de esta feromona, se interfiere la comunicación entre machos y hembras, se dificulta su encuentro, y en consecuencia no se produce puesta de huevos, evitando así el daño posterior de las larvas.