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Castilla y León, Galicia, Castilla-La Mancha y La Rioja evalúan sus convenios de colaboración
El consejero de la Presidencia de la Junta de Castilla y León, José Antonio de Santiago-Juárez, ha recibido esta mañana, en Valladolid, a sus homólogos de las comunidades autónomas de Castilla-La Mancha, Galicia y La Rioja. En este encuentro se ha avanzado en la creación de un grupo de trabajo para analizar y preparar las nuevas propuestas y espacios de colaboración que se incluirán en una segunda generación de los convenios ya suscritos. Las áreas de trabajo en común permitirán que la nueva generación de acuerdos sea formalizada por los presidentes autonómicos a partir de otoño. A la reunión han asistido el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas de Castilla-La Mancha, Leandro Esteban, el conselleiro da Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza de Galicia, Alfonso Rueda, y consejero de Presidencia y Justicia de La Rioja, Emilio del Río.
El objetivo del encuentro autonómico concreta el interés de que los habitantes de las zonas limítrofes reciban la mejor prestación de servicios esenciales y con ello se eleve su calidad de vida. Los textos revisados fija otros tres objetivos. Por un lado, minimizar los efectos de las “fronteras administrativas” que derivan de la pertenencia de los municipios de las zonas limítrofes de las comunidades autónomas -se trata de evitar soluciones de continuidad y mejorar la accesibilidad a los servicios públicos, con independencia de que sean prestados por uno u otro Gobierno, así como establecer alianzas donde se compartan recursos para contribuir al desarrollo común y proyectos orientados a la generación de riqueza y nuevas oportunidades-; por otro, promover acuerdos con otras comunidades autónomas para impulsar medidas dirigidas a lograr mayor eficiencia y austeridad.
La cooperación horizontal con otras comunidades autónomas, especialmente las limítrofes, es una prioridad del presidente Juan Vicente Herrera que se comenzó a desarrollar en la anterior legislatura y volvió a cobrar relevancia en el discurso de investidura de la presente legislatura. El fortalecimiento de estas relaciones, que se refuerzan hoy con el encuentro con el Gobierno de Castilla-La Mancha, Galicia y La Rioja, se fundamenta en el mandato del Estatuto de Autonomía, tal y como refleja su artículo 60.1. Cada acuerdo alcanzado previamente representa la aspiración de conseguir un autonomismo cooperativo y útil para los ciudadanos, en un marco de diálogo y en un contexto de crisis económica en el que solo la suma de esfuerzos y la colaboración leal entre Administraciones permitirá salir reforzados de ella. Este encuentro autonómico ha permitido repasar los acuerdos de colaboración suscritos y sus resultados para mejorar el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos, sobre todo aquellos que viven en zonas limítrofes.
Protocolos de colaboración ya vigentes
El Protocolo de Colaboración entre la Junta de Castilla y León y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha tiene por objeto prestar especial atención a la asistencia sanitaria, dependencia, educación, mujer, infancia, personas mayores, jóvenes, protección civil, consumo, extinción de incendios, licencias de pesca, cultura y turismo, agricultura y ganadería, carreteras y transporte de viajeros.
El 20 de enero de 2010, la Junta de Castilla y León firmó un Protocolo de Colaboración con la Xunta de Galicia que abarca las materias de asistencia sanitaria, dependencia, educación, mujer, infancia, personas mayores, jóvenes, protección civil, consumo y comercio, actividad física y deportiva, emigración, transportes, función pública y modernización administrativa, cooperación transfronteriza con Portugal, economía e industria, administración local y ámbitos laboral.
La Junta de Castilla y León y La Rioja firmaron un Protocolo de Colaboración, el 19 de junio de 2008, que en un principio tuvo en el objetivo de atender los temas de la asistencia sanitaria, dependencia, educación, mujer, infancia, personas mayores, jóvenes, protección civil, consumo, medios ambiente, cultura y turismo, agricultura y ganadería, función pública, justicia e infraestructuras. Asimismo, el 8 de julio de 2009, se firmó una adenda para ampliar la asistencia sanitaria, medio ambiente, puntos de encuentro familiar, defensa jurídica, innovación, investigación y desarrollo, financiación empresarial, y el transporte. Finalmente, el 10 de noviembre de 2010, se firmó una última adenda en la que se incluyeron temas como la dependencia, protección a la infancia y menores de edad, mujer, protección civil, medio ambiente, desarrollo rural, función pública y calidad de la administración, juventud, gestión tributaria y financiación autonómica.
Mayor participación de las comunidades autónomas
Los consejeros de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia y La Rioja han valorado el encuentro como fructífero y muy positivo para el avance en la cooperación horizontal entre los gobiernos de las distintas Comunidades Autónomas.
Castilla y León ha suscrito acuerdos con ocho comunidades limítrofes y ha iniciado los contactos con el Gobierno de Cantabria para que los acuerdos específicos ya vigentes se amplíen y se concreten en un protocolo que abarque todas las áreas de Gobierno. En la mayoría de las ocasiones, los protocolos iniciales se han ampliado posteriormente y también se han suscrito acuerdos multilaterales. Gracias a los esfuerzos y compromisos adquiridos hasta la fecha, 40.000 ciudadanos se han beneficiado directamente de los acuerdos de colaboración, recibiendo asistencia sanitaria o prestaciones de servicios sociales o educativos en una Comunidad distinta a la de residencia.
La Junta de Castilla y León quiere seguir avanzando en la consolidación y ampliación de los acuerdos existentes y por ello el Ejecutivo autonómico seguirá estrechando lazos de cooperación, en beneficio de los ciudadanos que viven en zonas limítrofes. El presidente Juan Vicente Herrera mantiene como uno de sus principales compromisos de legislatura profundizar en la cooperación de segunda generación, es decir, establecer medidas o acuerdos que persigan la eficiencia y la puesta en marcha de proyectos compartidos orientados a la generación de riqueza y empleo.
Protocolos y convenios con otras comunidades autónomas
En los últimos cinco años, la Junta de Castilla y León ha firmado más de 30 acuerdos o protocolos sobre diferentes materias: prestación de servicios básicos para la población de las zonas limítrofes o periféricas de la Comunidad, acuerdos en materia de violencia de género o en licencias de caza y pesca. Asimismo, se han firmado acuerdos con las Comunidades Autónomas con territorio en Picos de Europa; con la Comunidad Valenciana para transferencia de aplicaciones informáticas; con las cinco Comunidades Autónomas por las que discurre el Camino de Santiago francés; en el marco de la Conferencia de Gobierno de las Comunidades Autónomas se han suscrito 13 acuerdos de colaboración en distintas materias; y se consiguió el consenso con las 17 Comunidades Autónomas en relación con el dictamen de violencia de género que se presentó en el Comité de las Regiones en octubre de 2009.
Los buenos resultados de la colaboración se reflejan en algunos ejemplos concretos: 21.000 ciudadanos han sido atendidos en un hospital de otra Comunidad autónoma, por ser el más cercano a su residencia; se han trasladado cerca de 600 expedientes de personas dependientes a otra Comunidad; 2.500 alumnos están cursando estudios en un centro escolar o de formación profesional de otra Comunidad. Cabe reseñar que en materia de Protección Civil y Emergencias, en Castilla y León se han atendido 16.000 llamadas del 112 derivadas de otras Comunidades limítrofes; se han realizado 46 rescates conjuntos en zonas limítrofes; y efectivos de Castilla y León han intervenido en la extinción de 60 incendios en otras Comunidades.
En esta legislatura, el presidente de Castilla y León quiere impulsar la cooperación de segunda generación con otras Comunidades y territorios. Es la dimensión del “autonomismo cooperativo”, que da respuesta a una necesidad del modelo de Estado: la cooperación horizontal entre territorios en pos de objetivos comunes, desde una posición pragmática pero absolutamente leal con la idea de España. En la cooperación de segunda generación, Herrera se marcó dos grandes líneas de actuación: en primer lugar, medidas o acuerdos dirigidos a lograr mayores cotas de austeridad y eficiencia. En este ámbito se promoverá la contratación conjunta de bienes y servicios, y la posibilidad de dar un uso común a determinados dispositivos y servicios públicos. En segundo lugar, la puesta en marcha de proyectos compartidos, orientados a la generación de riqueza, de empleo y de nuevas oportunidades. Se trata de establecer alianzas para desarrollar, por ejemplo, redes culturales y paquetes turísticos conjuntos, proyectos compartidos de Investigación, Desarrollo e Innovación, etc.