El pico de la gripe desbarata aún más la atención sanitaria en los pueblos

El pico de la gripe está desbaratando aún más, si cabe, la atención sanitaria en las áreas rurales. En un año, en el que la vacuna está fallando técnicamente por la probable mutación en alguna de las cepas contempladas en la misma que ha conseguido resistir al ataque de los anticuerpos, el caos sanitario en los pueblos es patente.

La falta de médicos por bajas o por libranzas de guardia está provocando la confusión entre los enfermos, que ante la saturación de trabajo de los facultativos no saben en qué consulta ni en qué día serán atendidos, una duda que tampoco ayudan a resolver en los teléfonos de información del centro de salud de Astorga y así se ha podido constatar este lunes por Astorga Redacción.

En esta situación se encuentran estos días los pacientes de las cinco pedanías del municipio de Santiagomillas y también otros de La Cepeda como Quintana de Fon. A los primeros, el pico de la gripe les ha pillado con su médico titular de baja que la Consejería de Sanidad no cubre con la contratación de un sustituto, sino que obliga a realizar el servicio al profesional que atiende en Val de San Lorenzo. Ante la saturación de trabajo, la médica del Val se encarga de los consultorios de Santiagomillas cuando puede, pero si no le da tiempo ni tampoco puede anunciar mediante un papel pegado en la puerta del consultorio cuándo se podrá pasar, los vecinos de este municipio maragato acaban por no saber dónde ni cuándo podrán ser atendidos.

Otros casos denunciables están ocurriendo en La Cepeda, aunque es en Quintana de Fon donde padecen 'el más difícil todavía', ya que a esta pedanía el médico sólo acude una vez cada 15 días, si ocurre como esta semana que no ha podido pasar, los enfermos tendrán que esperar otros 15 días más para curar sus dolencias.

Reunión en febrero

Esta caótica situación se está produciendo cuando en la Consejería de Sanidad tienen sobre la mesa el acuerdo firmado en Astorga por 14 alcaldes de Maragatería, La Cepeda y Vega del Tuerto, que el pasado mes de noviembre solicitaron una reunión “urgente” con la Consejería de Sanidad, para atajar el déficit de personal de sanitario en los pueblos. Los alcaldes están recibiendo estos días un correo electrónico del Ayuntamiento de Astorga (que se está encargando de gestionar la reunión), anunciándoles que la entrevista “urgente” tendrá lugar en febrero, sin precisar la fecha concreta.

Una vez más la voz más reivindicativa en estas comarcas, la del alcalde de Valderrey Gaspar Cuervo, incide en que “la Junta es cómplice y ejecutora de manera consciente de que con el abandono del servicio sanitario, está forzando la desaparición de los pueblos”. En el Ayuntamiento de Valderrey se aprobó por unanimidad en el pleno del mes de diciembre, la moción respaldando el escrito consensuado en Astorga.

Recogida de firmas en La Cepeda

Donde no se están quedando de brazos cruzados es en los municipios de Villamejil, Vega de Magaz y Brañuelas, y en los próximos días los de Quintana del Castillo, donde se están movilizando en defensa de la sanidad pública rural. Desde antes de Navidad, están recogiendo firmas en apoyo del acuerdo rubricado por sus alcaldes en Astorga, para que la Junta de Castilla y León ataje el déficit de médicos de familia, enfermeras y enfermeros en las zonas rurales “de manera inmediata”.

Los vecinos de La Cepeda están reclamando con su firma una mayor dotación presupuestaria por parte de la Junta de Castilla y León para la atención primaria, “es ahí donde deberían concentrarse las inversiones” ya que “en la atención primaria y en particular la del medio rural, es donde se invierte poco, tarde y mal, lo que provoca que no se fije población y la falta de población es la justificación para no invertir más en nuestras zonas”.

En el escrito, se deja constancia de que la Junta tenga en cuenta la dispersión geográfica a la hora de asignar médicos y enfermeros por población. También inciden en el funcionamiento de una bolsa de empleo real y efectiva para profesionales de la medicina, porque es necesaria para cubrir las bajas, vacaciones y guardias médicas y sanitarias, “antes se sustituían y ahora se acumulan”, por lo que existe demasiada carga de trabajo para los profesionales: “la responsabilidad se ha trasladado a los propios profesionales de base, pero sin contar con el respaldo de las estructuras más altas de la administración”.

“Enérgica protesta” del alcalde de Villarejo de Órbigo

Por su parte, en el Órbigo, el alcalde de Villarejo de Órbigo, Joaquín Llamas, ha solicitado hoy de manera formal a responsables sanitarios de la Junta de Castilla y León una reunión urgente para estudiar soluciones no menos urgentes para los recientes problemas sufridos en las localidades del municipio por falta de médicos y la consiguiente falta de atención médica que se ha producido en fechas recientes.

En sendos escritos, remitidos a la Gerencia de Salud de León y el Bierzo, así como a la coordinadora de Centro de Salud de Benavides, al que el municipio está adscrito, Llamas traslada en nombre y representación de los vecinos de Villarejo de Órbigo la “enérgica protesta”, reclamando soluciones inmediatas que garanticen una atención médica suficiente y adecuada con el personal necesario.