La Diputación de León aprueba pedir a la Junta con votos de PSOE y UPL que guarde su reforma sanitaria
El Pleno de la Diputación de León celebrado hoy aprobó con los votos a favor del Partido Socialista y Unión del Pueblo Leonés, es decir, 13 'síes', una moción que habían presentado los primeros y en la que se pide que “se retire el plan reestructural de sanidad de la Junta de Castilla y León” presentado por la consejera Verónica Casado hace apenas unos días, así como que “se reviertan los recortes en el área de los últimos años”.
El portavoz del Grupo Socialista, Nicanor Sen, quiso trasladar con la moción “el enfado de los ciudadanos, los profesionales y los actores del sistema público de sanidad de la provincia de León con la propuesta de la Consejería de Sanidad”, al tiempo que mostró la “más fuerte oposición al plan reestructural porque, entendiendo que se necesitan cambios, éstas no son las formas ni las maneras”.
También votó a favor UPL, aún criticando la politización de este asunto, el vicepresidente de la Diputación y socio de gobierno de los socialistas, Matías Llorente, al poner puso de relieve la “tristeza” que le provoca que “el problema sirva para echarse la pelota en cara entre unos grupos y otros, cuando es de todos, en especial de quienes viven en los pueblos”, de manera que “no se puede seguir hablando de despoblación cuando se quitan servicios básicos y se provoca que la gente se tenga que ir”.
Por eso, para Llorente, “es el momento de ser serios y trabajar todos juntos para que la provincia de León pueda mantener la sanidad como tal”.
Por su parte, el grupo provincial de Ciudadanos -partido al que pertenece la consejera de Sanidad- votó en contra de la moción y su portavoz, Gemma Villarroel, consideró que “PSOE y UPL utilizan una mentira para atacar una propuesta de sostenibilidad del sistema”, mientras señaló que “ni hay consultorios cerrados ni servicios que se han dejado de prestar”, de igual forma que “no ha habido recortes”, por lo que ambos grupos “provocan una alarma social y una preocupación innecesaria”.
Villarroel quiso puntualizar que “Ciudadanos tan solo ha repensado el modelo sanitario”, para lo que “ha invitado a participar al PSOE en el Pacto por la Sanidad, pero se ha negado”.
La otra pata del gobierno autonómico de coalición, la del Partido Popular, también defendió su rechazo al texto. Lo hizo por boca de su portavoz, Francisco Castañón, quien invitó a los socialistas a participar en la mesa de sanidad “para aportar sus ideas” en vez de debatirlas en una moción que “busca crear inquietud y preocupación en la ciudadanía y en el medio rural”, por lo que quiso hacer hincapié en “el mensaje tranquilizador del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, quien aseguró que se ofrecerá una sanidad universal, de calidad y de todo el territorio”.
Castañón propuso que, en vez de debatir la moción presentada hoy, “se proponga presentar una conjunta en la que se proponga aumentar el número de plazas acreditadas para la formación en Facultades de Medicina o el número de plazas MIR”.
El último en tomar palabra en el debate fue el presidente de la institución provincial, Eduardo Morán, quien señaló que “el título oficial de mentirosos lo tiene Ciudadanos, que hoy dice una cosa y mañana lo contraria” y criticó que “Igea suelta un globo de dudo, al día siguiente Mañueco dice que fueron declaraciones horribles, creando así nerviosismo e inquietud”.
“No queremos que se deteriore el servicio sanitario y reflejamos el nerviosismo de alcaldes, concejales y la gente que gestiona el medio rural, por lo que seguiremos trabajando para dotar de mayor número de servicios al medio rural para que la gente no se vaya”, concluyó Morán.
