Calma chica en el inicio del curso escolar en la provincia
El inicio del curso escolar 2016/2017 llega con mayor calma que en los últimos años, un día después del inicio de las clases en los ciclos de Infantil y Primaria y a falta de que a partir del lunes que viene arranquen las clases de Secundaria.
De momento, y a falta de ver cómo resultan las conexiones de transporte escolar, que siempre deparan alguna incidencia más o menos grave, el único conflicto que ha surgido en el ámbito puramente educativo se ha dado en la localidad de Silván, del municipio berciano de Benuza, donde el anuncio inminente de cierre de la escuela ha levantado en armas a madres y padres, que ayer lunes se plantaron ante la Junta de Castilla y León para exigir su reapertura.
Pero incluso este conflicto podría tener resolución favorable. Ya que lo que en principio suponía una negativa total de la Junta, tras la reunión de ayer parece que se ha dejado en mano del Ayuntamiento de Benuza la posible solución, que pasaría por conseguir escolarizar a un menor más. Para ello, el Ayuntamiento comenzará a ofrecer vivienda e incluso empleo a alguna familia que desee instalarse, para así conseguir que la única escuela que cerraría este curso tampoco lo haga.
De momento, otro problema ya surgido hace tres años, la amenaza de que la ESO siga impartiéndose en el colegio rural agrupado de Riaño, continúa como una espada de Damocles, después de que una protesta de casi 2.000 personas en el año 2013 consiguiera que la Junta no aplicara su decisión inicial de trasladar a los estudiantes de Secundaria a Cistierna, como muy cerca, e incluso a Astorga en algunos casos.
La moratoria llega a su fin durante este curso y los afectados en Riaño siguen exigiendo que la Junta no sea drástica, que tenga en cuenta la especial situación de lejanía y climatología de la zona en la Montaña Oriental y que permita que el CRA se convierta en un centro de educación obligatoria (CEO), con lo que los alumnos permanecerían en la zona.
Otra curiosidad de este curso, como novedad, aparece en Sahagún, pero a priori sin causar problemas de ningún tipo. Se trata de la unificación en un sólo centro escolar de todos los alumnos que hasta ahora ocupaban dos, dejando libre uno de ellos listo para albergar el exigido centro de salud que ha de ejecutar la Junta de Castilla y León.
El Colegio de Enseñanza Infantil y Primaria (Ceip) Fray Bernardino de Sahagún queda así unificado definitivamente en la de la calle de Fernández de Castro, en cuyas dependencias ahora el Ayuntamiento deberá invertir más de 55.000 euros para su adecuación.
