Las bajas temperaturas y el granizo reducen en un 20% la cosecha del pimiento de Fresno-Benavente
A punto de comenzar la temporada alta de la recogida del pimiento, desde la Indicación Geográfica Protegida (IGP) del pimiento de Fresno-Benavente se estima que la cosecha de este año será aproximadamente un 20 por ciento inferior a la del año pasado. La culpa de este descenso la tienen las condiciones climatológicas adversas, más concretamente las bajas temperaturas de las últimas noches y el granizo caído durante las tormentas del pasado mes de agosto.
No sólo será menor la recolección que el año pasado, sino que además el fruto viene “retrasado” debido a esas mismas condiciones climáticas, que provocarán una recogida de alrededor de 300 toneladas menos de pimiento. Por ello, se calcula que serán unas 2.000 las toneladas que se recojan este año, ya que la IGP abarca algunas zonas que no se vieron afectadas por el granizo, aunque el retraso en todos los casos es “significativo”.
Así lo lamenta el presidente de la IGP del pimiento de Fresno-Benavente, José Ramón Bodega, que reconoce que la climatología “ha hecho daño” y eso influirá también en la próxima Feria del Pimiento de Fresno de la Vega, que se celebrará el último fin de semana de septiembre, donde se pondrán a la venta los primeros frutos, y donde previsiblemente habrá que incrementar los precios para compensar la falta de fruto.
Si en años anteriores la feria se celebra en el “momento central” de la temporada del pimiento, en esta ocasión se mostrarán “los primeros frutos”, mientras que las “segundas flores” llegarán “un poco más tarde”. Y es que el cambio climático también está afectando a la recolección del pimiento, cada vez más adelantado. “Antes el momento cúlmen era el mes de octubre, aproximadamente por la festividad de El Pilar, pero se ha ido adelantando por sí mismo”, reconoce Bodega.
Las condiciones “óptimas” para el cultivo del pimiento habrían sido temperaturas nocturnas no inferiores a los 15 grados, así como máximas que no superaran los 28 grados durante el día. Pese a no haberse cumplido esta máxima, la feria celebrará el último fin de semana de este mes su trigésima edición con la exposición de los pimientos disponibles, así como con la entrega de entre 14.000 y 15.000 raciones de pimiento asado.
Un año más serán miles de visitantes los que lleguen a Fresno de la Vega para este evento, entre ellos decenas de autocares procedentes de las comunidades limítrofes, mayoritariamente Asturias. Por eso, y dada la afluencia de personas, desde la IGP se hace un llamamiento a las administraciones para que tengan en cuenta esta cita anual a la hora de promocionar y exponer otros productos de la provincia de León.
Dice el dicho que 'En León, monumentos, pero en Fresno, ¡vaya pimientos!', por lo que se insta a que se solicite también la declaración de esta fiesta como de Interés Turístico Regional, al tiempo que se insiste en la posibilidad de llevar a cabo una muestra de productos de León porque las empresas “quieren venir a vender aquí”, explica Bodega, aunque reconoce que por el momento “no hay lugar”.
