Pagar deuda frente a invertir en los pueblos: la prioridad de la Diputación en 2015
Pagar deuda. Eso es lo que hizo básicamente la Diputación de León con sus cuentas durante el 2015 según los datos que ella misma ha revelalado al dar a conocer su proyecto de presupuestos para este 2016. En términos globales la Diputación rebajó su deuda en 2015 en 21,39 millones de euros, es decir, que de uno de cada seis euros de los que dispuso en 2015 los destinó a rebajar su deuda.
Pero el dato supone prácticamente duplicar el dinero previsto en sus presupuestos de 2015 a este fin. Si en el proyecto presentado por el entonces presidente y hoy diputado provincial Emilio Orejas Orejas se contemplaba reducir la deuda en 12,92 millones de euros se destinó un 65,5% más de dinero a esta finalidad.
Lo que llama la atención de la cifra es lo abultado teniendo en cuenta la situación de las cuentas de la institución provincial, de las que el Equipo de Gobierno siempre ha presumido de que son saneadas. De hecho fue siempre una de las cuestiones de las que presumía la fallecida Isabel Carrasco, de haber heredado una institución con problemas financieros y haberla saneado. Sólo entre 2010 y este 2015 la deuda se ha reducido en 64,53 millones de euros. Dos años marcan los tijeretazos notables a la deuda, el 2013 con un recorte de 23 millones y este pasado 2015.
La Diputación destinó en 2015 la mayoría de sus remanentes presupuestarios a pagar deuda, hasta los 21,39 millones, el doble de lo presupuestado
Lo llamativo del recorte de deuda del año pasado radica en que el importe global de la deuda de la Diputación superaba ligeramente el 52% de su disponibilidad presupuestaria, una cifra que siendo importante no supone un problema financiero ya que el límite legal para los entes locales es del 110% del presupuesto.
El aumento del gasto destinado a pagar deuda, que cabe recordar Isabel Carrasco achacó públicamente en alguna ocasión a la gestión de su compañero del PP y antecesor Javier García Prieto, se debe fundamentalmente a que las partidas que no han completado el gasto presupuestado se desviaban a estos pagos.
La elevada amortización de deuda en la institución provincial provocó la queja en el último pleno del año pasado por parte de PSOE y de UPL. El fallecido portavoz de los socialistas, Luis Rodríguez Aller, preguntó por la cifra tan alta de remanentes e instó a que se usaran para invertir en los pueblos. El diputado leonesista Matías Llorente también cuestionó la política de pagar deuda mientras siguen vivas las necesidades de los pueblos, denunciando también que no se repartan los remanentes de las partidas de inversiones en los municipios y juntas vecinales o planes de empleo.
Desgobierno por miedo a la 'Púnica'
Entre las razones que explicarían el aumento del gasto financiero del Palacio de los Guzmanes estarían la parálisis que se ha vivido en la institución provincial desde el fallecimiento de Carrasco y la detención de Marcos Martínez en el marco de la trama corrupta 'Púnica', por la que también se encuentra imputado todo un cargo de relevancia como 'Suso' López, trabajador en la Intervención de la institución.
La cautela, o “miedo” según algunas fuentes, con la que se ha trabajado en la Diputación durante el 2015 y la coincidencia de proceso electoral para su renovación, han minado el trabajo de la entidad por lo que buena parte de sus fondos sin gastar no habrían tenido destino. De ahí la decisión de recortar deuda adoptada por los equipos de Gobierno de este pasado año.
Para este 2016 las primeras cuentas de Juan Martínez Majo al frente de la Diputación contemplan un recorte de deuda en 10,6 millones de euros, para dejarla en unos 41 millones al finalizar el ejercicio. La cuestión es saber qué harán con los remanentes de este año (si existen), si dedicarlos a pagar deuda como dicta la ortodoxia económica del PP u optará por invertir en los pueblos de la provincia. La respuesta, dentro de un año, con el balance de la ejecución presupuestaria.
