La luz subirá un 3,2% por la reforma energética del Gobierno
Era una de las reformas más esperadas del Gobierno y este viernes el Consejo de Ministros ha dado luz verde a la misma, tras una intensa batalla entre el ministerio de Hacienda y el de Industria, principales implicados en la misma. Finalmente parece que la batalla la ha ganado el ministro Montoro frente al ministro Soria, al asumir menos coste del solicitado por el sector eléctrico en los Presupuestos Generales del Estado.
En el documento resumen de la reforma el Gobierno reconoce que el precio de la electricidad en España es de los más caros de Europa, sólo superado por Chipre e Irlanda. Pese a eso en el reparto de los costes del sistema eléctrico para eliminar el déficit de tarifa los consumidores finales asumirán 900 millones de euros vía recibo, tanto como lo que aportará el Estado en los Presupuestos Generales. Otros 2.700 millones de euros serán asumidos por las empresas del sector eléctrico mediante un recorte en los costes regulados.
Según el Gobierno sin sus medidas la luz subiría un 42%.
La asunción de una parte de los costes por los consumidores llevará a un alza del 3,2% del precio de la luz, adicional al que se produzca en las subastas que establecen el precio. De momento no se ha dado conocer si subirá de un solo golpe y las fechas en que ocurrirá.
El Gobierno dice buscar con esta reforma “equilibrar definitivamente el sistema eléctrico, evitar nuevos desequilibrios y garantizar el suministro al consumidor al menor coste posible y de la forma más transparente”. El déficit de tarifa acumulado actualmente asciende a 26.000 millones de euros y el previsto adicionalmente para el 2013 es de 4.500 millones de euros, cuyo coste reparte entre empresas, consumidores y Estado vía Presupuestos.
Nuevo diseño de tarifas
El Gobierno anuncia que se simplifica y clarifica la factura eléctrica y que se introducen modificaciones en la tarifa para aumentar la competencia, aunque todavía no ha detallado las medidas que adoptará en este sentido.
La Tarifa de Último Recurso, a la que se acogen la mayor parte de los consumidores domésticos, pasa a denominarse Precio Voluntario al Pequeño Consumidor. La reforma habilitará nuevas comercializadoras para el suministro de estos clientes, permitiendo además la competencia entre ellas, para ofrecer ofertas y descuentos. Asimismo, se agiliza el proceso de cambio de compañía suministradora y se refuerzan los mecanismos de atención al cliente.
Los consumidores más vulnerables podrán continuar acogiéndose al descuento del bono social.
