Gresca en el Pleno de Bembibre que acaba con la expulsión del portavoz del PSOE
El Pleno de Bembibre aprobó este jueves el presupuesto municipal, con la ausencia en la sala de los concejales de la oposición socialista. La razón de ser: la expulsión del portavoz cuando interrumpió al alcalde acusándole de mentir sobre los terrenos del centro de salud. Rey argumentó que mientras el alcalde le había llamado a él la atención por no ceñirse al punto del orden del día, Otero estuvo “un cuarto de hora hablando de algo que no tiene que ver”.
El portavoz socialista dijo que la versión de Otero sobre la polémica por la cesión de los terrenos del centro de salud era mentira. Mientras el alcalde explicaba que la cesión acababa de formalizarse en fechas recientes, los socialistas defendieron que la misma se había hecho en la anterior legislatura con el matiz que la Junta no aceptó los terrenos. Y éste matiz fue la clave del enfrentamiento.
Manuel Ángel Rey ya venía de un apercibimiento anterior sobre posible retirada del turno de palabra, y cuando el debate se llevó a la polémica por el centro de salud intentó intervenir durante el turno de palabra del alcalde hasta en dos ocasiones con advertencia de que una tercera supondría la expulsión. Y así fue.
“La realidad es que, por las circunstancias que fueran, no había cedido los terrenos”, dijo el alcalde, que se encontró con la acusación del portavoz socialista: “eso es mentira”, dijo y repitió en varias ocasiones mientras Otero anunciaba su expulsión. “La Junta no había aceptado la cesión, está usted mintiendo”, añadió.
Una vez finalizó el Pleno, ambos hicieron una valoración sobre lo sucedido. Rey insistió que se debe a “la gestión de los tiempos y de los debates”, y acusó a Otero de no predicar con el ejemplo cuando había pedido un poco antes al portavoz que se ciñera al Pleno cuando posteriormente “él estuvo un cuarto de hora hablando de algo que no tenía que ver con el presupuesto”. Justificó que le llamó la atención porque “estaba mintiendo” y “no podía seguir permitiendo que siguiera con la falsedad”.
Para Otero, sin embargo, existen otros factores a tener en cuenta. En concreto, al regidor no le queda duda que existían otras razones como la intención de “reventar el Pleno”. “Yo ya sabía la intención de alguien de los que estaban en el grupo socialista que venía al Pleno a reventarlo”, aseguró, y manifestó incluso que así “lo dijo públicamente o en algún sitio porque sabía que iba a trascender”.
Otero planteará una reunión a dos bandas con “algún referente dentro del PSOE, no sé a qué nivel, porque esto no parece un Pleno, parece la selva”. En este sentido, expresó su voluntad de que esta situación cambie. Para Rey la situación sólo la puede cambiar el alcalde, a quien acusó de instigar el enfrentamiento.
Rey: presupuesto “fantasma, irreal y ficticio”
El debate sobre los presupuestos tuvo lugar durante casi hora y media, y el enfrentamiento y abandono ocupó los últimos cinco minutos. El resto del tiempo se centró en el debate sobre el fondo pero sin dejar de lado las habituales referencias a los temas de enfrentamiento.
El presupuesto municipal para 2014 se eleva a 11,2 millones de euros. El alcalde resaltó el aspecto inversor por encima de los 4 millones de euros que coexiste con una rebaja de impuestos.
En el capítulo de inversiones figura la novena fase del polígono de San Román, la adquisición del edificio Bernardo Alonso Villarejo, el monumento al Señor de Bembibre, urbanización de calles, la iluminación en la carretera a Santibáñez, estación de autobuses y varios parques.
El PSOE calificó este presupuesto como “fantasma, ficticio e irreal”. Rey acusó a Otero de “inflar” partidas para cuadrar el resultado, y en concreto no concibe que esta rebaja de impuestos se plasme con una mayor recaudación sobre el papel cuando la misma debería ser menor. El portavoz del equipo de gobierno, Sigifredo Benavides, preguntó si Rey no ha visto el resultado del remanente de tesorería, que se eleva a 2,4 millones de euros. Y acusó a los socialistas de no haber bajado en 16 años los impuestos, que ahora critican la política tributaria municipal.
La novena fase también fue objeto de enfrentamiento, igual que la adquisición de la vivienda de Villarejo que el PSOE no le ve utilidad. Otero reprochó a la oposición que el anterior alcalde la había intentado comprar.
El ambiente también se caldeó cuando Rey acusó al PP de emplear fondos municipales para iniciar el proyecto de la estación de autobuses cuando debería ser la Junta la que construya la infraestructura. Benavides concluyó que “se prometió en campaña y aún estamos a tiempo de cumplir los compromisos”.
