Después de la huelga general vienen los recortes
Primero ha sido la huelga general, calificada de éxito por los sindicatos convocantes, de fracaso por la patronal y con incidencia moderada por el Gobierno. Y este viernes llega el grueso de las medidas de ajustes y recortes al dar su visto bueno el Consejo de Ministros que preside Mariano Rajoy los Presupuestos Generales del Estado.
Unos presupuestos sobre los que se rondará un recorte medio del 15%, según avanzó el Presidente desde Corea del Sur, y donde el Gobierno pretende dar cabida a las exigencias europeas sobre nuestra economía y déficit y el cumplimiento del programa electoral con el que ganó las elecciones el pasado 20 de noviembre.
La expectación por los presupuestos es muy alta, tanto en España como a nivel internacional, ya que el retraso en su presentación por las elecciones andaluzas y asturianas ha hecho que le hayan llovido críticas al gobierno de Rajoy. El presidente del Gobierno insistía en días pasados en que los presupuestos serán “muy austeros pero equitativos” y que seguirá con la agenda reformista de su gobierno: “no me voy a quedar sin hacer nada”. Dentro de lo poco que se ha conocido es que no subirán el IVA y mantendrán congelado el sueldo de los funcionarios previsiblemente. Lo demás seguro es que los presupuestos cumplirán con la imposición de la Unión Europea de que el déficit público no supere el 5,3% en 2012 con la meta del 3% para el año 2013.
El ayuntamiento de León aprueba su plan de ajuste
El regidor de la capital leonesa, Emilio Gutiérrez (PP) ya dio a conocer las líneas maestras de su plan de ajuste para el ayuntamiento capitalino. En total se buscan ahorrar 300 millones de euros en 10 años, que incluyen devolver el préstamo del Estado para pagar a los proveedores, con medidas como unos 150 despidos, cierre de servicios como guarderías, el albergue municipal o el laboratorio municipal y congelar la incorporación de personal a la plantilla municipal. En un pleno de este viernes se aprobará por la mayoría absoluta que dispone el Grupo Popular, ya que además un plan de ajuste era una de las medidas obligatorias del Ministerio de Hacienda para poder acceder al crédito para pagar a proveedores, que en total asciende a 160 millones de euros. Una vez en marcha habrá que valorar su impacto en la economía local y en la actividad del ayuntamiento, que no podrá eludir su cumplimiento bajo pena de sanciones por el ministerio.
Ponferrada también ajusta
La segunda ciudad de la provincia y capital berciana también somete este viernes su plan de ajustes a votación en su pleno municipal. El crédito solicitado por el ayuntamiento berciano al ICO alcanza casi los 5 millones de euros y se hace necesario un ajuste para este año de unos 3 millones de euros, aunque el ayuntamiento ha anunciado que no habrá despidos y buscarán recortar en horarios o medidas de otra naturaleza. La aprobación del plan del alcalde Carlos López Riesco (PP) dependerá de la disposición de la oposición de Ismael Álvarez (IAP) o Samuel Folgueral (PSOE), aunque este último ha criticado el plan y elevado la deuda a proveedores a más de 9 millones de euros. Habrá que ver el debate y si hay acuerdo en el pleno municipal para dar luz verde al plan de ajuste ponferradino.
