El mister del Ademar reconoce la dureza del sorteo

El entrenador del Reale Ademar, Jordi Ribera, ha reconocido que el enfrentamiento contra el Barcelona, que ha deparado el sorteo de la Copa del Rey, será “duro y exigente”, aunque ve a su equipo “capaz de todo, si se dan las circunstancias favorables”.

Para Ribera, los leoneses han demostrado su “competitividad” en este tipo de competiciones y tan solo se mostró preocupado porque las lesiones puedan lastrar el potencial de su plantilla, dado que en la actualidad no puede contar con dos de sus tres centrales, el internacional Carlos Ruesga y Jorge García Vega.

Ribera es consciente que el líder de la Liga ASOBAL “era uno de los dos rivales que siempre se intentan evitar en una primera eliminatoria”, pero recurrió al tópico de recordar que “si se quiere ganar un título de estas características casi siempre hay que derrotar a los más fuertes antes o después”, dijo.

Por su parte, el presidente ademarista, Carlos Pollán ironizaba sobre el resultado del sorteo afirmando que “empezamos a tener cierto cariño a esta eliminatoria que parece estar repitiéndose últimamente”, afirmó en alusión a este mismo emparejamiento en la pasada Copa ASOBAL, también en Vigo.

Pollán no quiso entrar en críticas hacia el sistema de sorteo empleado en esta edición copera, dada la excepcionalidad de permitir la participación al anfitrión, Octavio Pilotes Posada, a pesar de ser un equipo de la División de Honor B.

“Fue un compromiso de la pasada temporada y así hay que aceptarlo, pero está claro que indirectamente el hecho de que hayan podido elegir el cuadro por el que ir su equipo, incide en otros participantes, en este caso nosotros”, manifestó.