La relevancia del cine en la actualidad
Tengo la sensación al ver una película que al terminarla solo podré compartir mi opinión en algunas webs especializadas en cine o en un pequeño círculo de amigos que se ha ido moldeando a lo largo de los años a los que les apasiona el séptimo arte con la misma intensidad que a mí.
En mi opinión, hay dos formas de entender el cine. Una es entender el cine como entretenimiento, como un espectáculo. La otra, es entenderlo como arte.
La mayoría de la gente hoy lo entiende como entretenimiento y esto puede ser peligroso, pues la mayoría de directores quieren vivir de su trabajo, y si premiamos el espectáculo antes que el arte ese es el camino que la mayoría seguirán, siendo hoy prácticamente desconocidas obras como, 'La Passion de Jeanne d'Arc' / 'La Pasión de Juana de Arco' de Carl Theodor Dreyer o 'Freaks' / 'La parada de los monstruos' de Tod Browning, por nombrar algunas.
Personalmente, entiendo el cine como arte. La cinematografía tiene la capacidad de agrupar todas las artes que se le antojen, consiguiendo, si se hace adecuadamente, una expresión artística compleja y bella como ninguna.
Pero, ¿alguien nos cuenta algo alguna vez sobre la importancia del cine como expresión artística?; creo que todos, hasta los que han tenido la suerte de encontrar a alguna persona cercana en su entorno que les haya hablado sobre François Truffaut o Billy Wilder conocen la respuesta.
Cada película es una historia y de cada historia se aprende algo, pero estamos inmersos en una época en la que aprender es un placer desechado al olvido; es un problema generacional, la gente joven también lee mucho menos que anteriores generaciones y esto no es pura casualidad. Estamos sistematizados para entretenernos y no para realizar esfuerzos, por ínfimos que sean.
Por otra parte, todo el trabajo que hay detrás de cada fotograma no está reconocido tanto como nos gustaría. Me encantaría encender la televisión y poder ver un programa de cine en el que además de valorar las películas que ocupan la cartelera, se proyectasen los making of de películas de hace unas décadas con sus correspondientes entrevistas a los directores, actores y otros miembros del equipo técnico. Hacer buen cine, contar una historia a través de imágenes de forma que éstas se queden grabadas a fuego en tu memoria, es un trabajo complejo, duro y en ocasiones poco valorado.
Para concluir me gustaría mencionar que estudios prevén que en los próximos años solo el 1% de la población española verá las películas en versión original, una pobre cifra para alguien que entiende la versión original como una forma de acercarse aún más al cine.