Cuarto álbum de estudio de Bruce Springsteen. Tal vez uno de los mejores de su carrera junto con el emblemático 'Born to Run', el magistral 'The River' y el primerizo 'Greetings from Asbury Park, N.J.' Un trabajo cargado de grandiosa sonoridad de principio a fin. 10 canciones que constituyen un todo prácticamente perfecto, un brillante y visceral conjunto en el que destacan temas como el actual himno Badlands, la inspiradora Candy´s Room (una de las favoritas de los fans), la legendaria The Promise Land o la propia Darkness on the Edge of Town (toda una declaración de principios). Un disco sólido, donde Springsteen termina por definir ese sonido tan característico, su rock épico.