Más allá de la trilogía
El Padrino, Star Wars(en dos ocasiones) o El Señor de los Anillos conforman ese club selecto de grandes trilogías de la historia del cine, el número tres parece ser un número fetiche para los estudios que pocas veces alargan una saga más allá de la tercera película.
EnPiratas del Caribe, ni Jerry Bruckheimer ni Disney se atreven a soltar su mayor fuente de ingresos en los últimos años aunque artísticamente puede que la saga estuviera amortizada en su tercera entrega.
Esta última edición de la saga nos da pie a analizar algunas de las grandes sagas, siempre en tamaño pero no, desgraciadamente, no en calidad, que se han producido desde que el fenómeno renaciera, en los 80, en la calle estadounidense llamada Elm, Pesadilla en Elm Street de la mano de el gran Wes Craven, nueve películas de momento, uno no se atreve a decir si la última Pesadilla en Elm Street El Origen será la última, remakes aparte nos interesa el proceso entre el año 84 y el 91, en el que se ruedan 6 películas en siete años, exprimiendo la saga.
James Bond es el agente secreto más público de la inteligencia inglesa, 23 películas nos cuentan los avatares del agente con licencia para matar.
Viernes 13, la historia de Jason se alarga hasta las 12 películas entre 1.980 y un remake en 2.009, alguien podría decir que el guión no da más de si, un asesino en serie que se dedica a atemorizar, y de paso asesinar, a cualquier joven que se interponga en su camino.
Star Trek, 11 películas para una saga que ha renacido el pasado 2010 de la mano del televisito JJ Abrams con la más que aceptable Star Trek XI.
El cine de terror es un terreno abonado para que las secuelas se alarguen, ya en los años 2.004 se estrenó Saw, un más que interesante tour de force de los finales sorprendentes, que al al año siguiente se convierte en saga y, siete años después supone un hito al lograr introducir en las carteleras una película anual con el último estreno de Saw 3D en 2010.
