El único parque del Casco Histórico de León, el Jardín del Cid, reabre con más juegos infantiles y más accesible
El Jardín del Cid, único parque ubicado en el Casco Histórico de la ciudad de León, ha sido reabierto al público tras concluir las obras de remodelación, mejora e instalación de juegos infantiles verdaderamente útiles, unos trabajos que se han ejecutado en la práctica totalidad de su superficie de 3.861 metros cuadrados y en casi el doble de tiempo estimado, que era de tres meses y se ha alargado hasta cinco.
Los trabajos han tenido un coste final de inversión de 412.908 euros, pagados a mayores del multimillonario contrato de privatización del mantenimiento de jardines, fuentes y juegos que está en vigor con un coste para las arcas públicas de 37 millones de euros y que estará en vigor hasta el año 2029.
Entre las principales actuaciones realizadas, destaca la renovación casi completa del pavimento, formado por grandes losas que presentaban un estado deteriorado e irregular, mejorando así la accesibilidad, lo que conllevado la sustitución de antiguas lajas de piedra por un nuevo solado que habrá de ser más resistente. Asimismo, se han ampliado las zonas de juegos infantiles, ahora con pavimentos amortiguadores y nuevos juegos en hasta tres puntos donde sólo había uno y escaso.
En la vegetación, además de intentar paliar el déficit de césped en varias zonas que lleva décadas produciéndose, se ha realizado una combinación de diferentes tipos de especies vegetales, y también se ha trabajado en los bancos históricos de piedra, sustituyendo en su entorno el césped, casi siempre desgastado por el uso, por adoquines de granito. También hay algunos bancos nuevos y se ha limpiado en profundidad su icónica fuente central.
La obra ha incluido trabajos de restauración y de limpieza en la muralla histórica, en los muros de cerramiento y también en la verja que delimita el parque, así como se han arreglado las escaleras de acceso al tramo paseable superior de la muralla, los cristales protectores y las barandillas, que habitualmente sufren numerosos actos vandálicos muy costosos de reparar.
Hay que recordar además que la mayor parte del parque, que permanecía abierta durante los trabajos, se acabó cerrando por completo al aparecer algunos ejemplares de ratas, que obligaron al Ayuntamiento a adoptar esta medida para implementar un control especial de desratización.
El alcalde, José Antonio Diez, que acudió a la presentación del resultado del jardín junto al concejal de Desarrollo Urbano, Luis Miguel García Copete, y responsables de la empresa que ha ejecutado los trabajos, resaltó que el sistema de vigilancia instado con una cámara apuntando a la zona ha rebajado mucho estos daños ante el temor de los autores a ser identificadas. También confía en que mejore el uso irregular que de este parque han hecho a veces grupos de personas, por ejemplo haciendo botellón y otras actividades perseguibles. Diez animó ahora a los vecinos a disfrutar de “un lugar emblemático por su historia y por ser prácticamente la única zona verde del Casco Histórico”.