UGT denuncia “persecución sindical” en call centers ligados a Cel Celis en San Román de Bembibre
UGT denunció hoy la 'persecución sindical' que se está viviendo en tres de los siete call center vinculados a la empresa Cel Celis, ubicados en el polígono industrial del Bierzo Alto de San Román de Bembibre (León). El sindicato denunció el despido de tres candidatos a delegados sindicales y seis trabajadores afiliados a la UGT en las plataformas de Inversiones de Negocio 2013, Inversiones de Negocio 2014 y Jazztel.
El responsable provincial de la Federación de Servicios, Enrique Reguero, fue el encargado de denunciar esa 'persecución' que el grupo empresarial Cel Celis tiene contra los tres agentes que presentaron su candidatura el pasado 27 de marzo. “Presentamos el preaviso a la empresa y acto seguido nos han despedido”, explicó Reguero, que lamentó “profundamente” que se vulneren así “los derechos de los trabajadores a sindicarse libremente y a representar a sus compañeros en los centros de trabajo”.
Ellos tres no son los únicos despedidos, la empresa también ha echado a otros seis trabajadores, también ugetistas. “Estamos ante una situación lamentable”, insistió Reguero, que recalcó que ya la empresa matriz en sus ofertas de trabajo indica “abstenerse afiliados a sindicatos”.
Así, recordó que esta empresa surgió originariamente para la construcción de células fotovoltáicas y que recibió millones de euros en subvenciones “para derivar ahora en un call center en el que no se respetan los derechos de los trabajadores”.
Reguero exigió la readminisión de los nueve despedidos y denunció que se trata de prácticas “de otros tiempos y de países tercermundistas”. “Ahora que a los trabajadores se nos pide a los trabajadores movilidad geográfica y que los jóvenes tienen que buscarse la vida fuera, invito a estos empresarios a que salga, vayan a países como Alemania y se formen para ser buenos empresarios y no caciques que nos recuerdan a tiempos anteriores”, apostilló.
Incumplimiento del convenio
En esta línea, hizo un llamamiento al principal cliente de esta empresa, Jazztel, porque “tiene depositada su confianza en una compañía que no respeta los derechos que fija el convenio de call centers”. Y es que, denunció Reguero, en las plataformas de Cel Celis no se respetan las pausas visuales, no se cumplen los preavisos de turno y fines de semana ni se informan por escrito, no se compensan festivos con descansos, no se realizan los reconocimientos médicos obligatorios y se comparten las almohadillas para los cascos que deben ser de uso personal exclusivo.
A estos imcumplimiento se suma, precisó el responsable sindical, que tampoco se cumplen los premios por objetivos ni los descansos de dos fines de semana al mes, mientras los cursos de formación se gijan fuera del horario laboral y no existe la categoría comercial al que tienen ya derecho de reconocimiento muchos de sus agentes.