Una policía local de León entrega el arma homicida y las detenidas por matar a Carrasco confiesan
Las últimas horas de la tarde y la noche de este martes han sido cruciales en la investigación judicial sobre el asesinato de Isabel Carrasco. Hasta el punto que las dos implicadas, Montserrat González (55) y Monteserrat Triana Martínez (35) finalmente acabaron confesando a la Policía su implicación en los hechos y contando como sucedió y la organización del asesinato a tiros de la presidenta de la Diputación. Si bien inicialmente se habían mostrado muy frías y en absoluto conocedoras de los hechos finalmente han confesado lo ocurrido tras someterlas la Policía a un careo entre ellas, en el que se derrumbaron
Gracias a esta confesión y a la entrega del arma de los hechos en Comisaría por parte de una tercera persona -que según la Cadena SER se trataría de una mujer policía local de León y Europa Press identifica como R.G.R., de 41 años de edad- de la que se investiga su participación concreta en los hechos, se comienza a cerrar el círculo de esta investigación, jalonada de detalles cada vez más surrealistas y escabrosos. El arma encontrada es un Taurus a la que faltan tres proyectiles. La mujer permanece detenida mientras continúan las pesquisas para confirmar su versión de los hechos, que el arma apareció en su coche aparcado en la zona, y esclarecer totalmente su participación o no en esta truculenta historia.
Además, en un segundo registro del domicilio de Montserrat Triana Martínez -tras confesar- la Policía Nacional encontró otro arma, aunque no usada en el crimen, y una gran cantidad de marihuana -1,5kg- que se investiga qué relación mantiene con el asesinato de Carrasco, si es que la tiene. Las armas son del calibre 22 y se investiga su procedencia, sin descartar ninguna de las opciones de o bien que provengan del entorno familiar o que pudieran haber sido adquiridas para el asesinato y se mantienen abiera una investigación para aclarar de dónde han salido el arma de los hechos y la otra, puntos fundamentales para resolver el caso.
La prueba policial sobre uso de armas de fuego ya había revelado este martes que había sido la madre, Montserrat González, la autora material de los tres disparos mortales que costaron la vida a Isabel Carrasco. Fueron dos disparos a quemarropa por la espalda y uno en la nuca, ya en el suelo.
Aunque incialmente las detenidas negaron su participación varios testigos presenciales las habrían identificado como las asesinas de la presidenta de la Diputación de León. Entre ellos el policía jubilado que fue testigo de los hechos y siguió a las implicadas hasta detenerlas con ayuda de la Policía Local.
Hay que recordar que a la implicación ahora de una policía local, pendiente de aclarar su participación concreta, las dos detenidas y confesas asesinas de Isabel Carrasco eran mujer e hija del inspector jefe de la Policía en Astorga y mantuvieron una estrecha relación personal con la presidenta de la Diputación de León.
Se espera que ambas pasen a disposición judicial en horas y será ya el juez de instrucción número 4 el que determine las medidas a adoptar con las dos presuntas asesinas.