Pasión por la cecina de chivo
La Feria de la Cecina de Chivo de Vegacervera congregó un año más a miles de personas llegadas de todo el territorio provincial para asistir a la que, en sus 24 ediciones que cumple este año, se ha convertido en una de las citas más importantes, consolidadas y esperadas del calendario de ferias y fiestas de la provincia de León. El habitual intenso frío de principios de noviembre en León no frena a los cada vez más visitantes que eligen su presencia en esta feria como el mejor plan para el fin de semana.
A pesar de que el recinto instalado en Vegacervera abre sus puertas en la jornada de sábado, es el domingo por la mañana cuando se ha convertido ya en una tradición la asistencia a esta feria. Este hecho queda patente desde primera hora de la mañana, cuando ya resulta extremadamente difícil encontrar un aparcamiento libre a menos de 300 metros del recinto, algo que ya se advierte al cruzar el cartel que anuncia la llegada a Vegacervera, donde es posible apreciar a los primeros vehículos estacionados.
El paisaje y el ambiente festivo que se viven en esta feria son auténticos atractivos, aunque el principal reclamo es, como indica el nombre de esta feria, que el próximo año cumplirá 25 años, uno de los manjares de la gastronomía leonesa: su cecina. Son múltiples las formas de consumir la cecina en sus múltiples variedades, aunque de manera habitual la más frecuente es curada, acompañada por un chorrito de aceite de oliva. Pero llegado el frío del otoño y aproximándonos al invierno, la cecina de chivo guisada o 'entrecallada', como suele decirse, pasa a ser un auténtico atractivo en bares y restaurantes.
En la jornada de hoy, esta opción pasa a ser el gran reclamo y el ejemplo claro del gran número de seguidores de este alimento, referente ya en la comarca, donde se espera también con ansia esta cita, que permite dar vida a la zona y crear riqueza en el municipio. El alcalde de Vegacervera, Luis Rodríguez Aller, expresó su orgullo por una feria que “se va consolidando” y que cada año tiene “más calidad en la exposición y venta y también en la degustación”, aunque hizo un llamamiento a las diferentes adminsitraciones para que sigan apostando y potenciando esta cita.
Y todo ello volvió a quedar patente. En una jornada soleada, pero de bajas temperaturas, los asistentes se agolpaban ya desde primera hora de la mañana para adquirir su ración de cecina de chivo. Apenas pasaban las 11.30 horas de la mañana cuando una larga fila aguardaba, previo pago de seis euros, a recibir su plato de barro conmemorativo de la feria, sobre el que podía apreciarse un buen pedazo de cecina de chivo, morcilla y chorizo y pan de hogaza, acompañado por un vaso, también de barro, con vino para acompañar.
Más de uno no pudo resistirse a la tentación y consumió un segundo plato en un día en el que para muchas familias la asistencia a la Feria de la Cecina de Chivo de Vegacervera se ha convertido en un atractivo habitual y en una manera de pasar la jornada dominical. Y en una zona próxima a la habilitada para la degustación, no faltaban otras opciones para acompañar: la venta de dulces, embutidos, licores, artesanía, quesos... para poner el punto y final a una jornada 'redonda' en la montaña leonesa y en la que la cecina de chivo volvió a demostrar que es una auténtica pasión para muchos.
