La nieve corta el puerto de Las Señales

El temporal de nieve de los últimos días en Castilla y León deja ya menos problemas en las carreteras y a estas horas ya sólo se encuentran cerrados al tráfico cuatro puertos de montaña en las provincias de Burgos, León, Segovia y Salamanca y obliga a la utilización de cadenas en otros cinco altos, además de a extremar la precaución en otros cinco puntos de la red regional, según informaron fuentes de la Dirección General de Tráfico.

Los puertos cortados al tráfico se encuentran en la localidad leonesa de Cofiñal (LE-333), al igual que la SG-112, en Riofrío de Riaza, que une la provincia de Segovia con Guadalajara; la CP-003, en Candelario, una de las carreteras de acceso a la estación de esquí salmantina de La Covatilla, y la BU-572, en Río de Lunada.

Por su parte, requieren el uso de cadenas en la provincia de Burgos la carretera la BU-820, en Pineda de la Sierra, en el puerto del Manquillo; la BU-570, en Río Trueba; la BU-571, en Espinosa de los Monteros; y la BU-V-5021, entre Burgos capital y Poza de la Sal. A ellas se suma el puerto de Piedrasluengas, en la carretera CL-627, a su paso por la localidad palentina de Camasobres.

También, se encuentra prohibida la circulación para camiones y articulados en la N-623, entre Ubierna y Cilleruelo de Bezana; mientras que se recomienda extremar la precaución para transitar por la N-232, en Incinillas y Soncillo, y la N627, desde Fuencaliente de Lucio a Ubierna, ambos tramos en la provincia de Burgos. En la misma situación se encuentran, en León, la N-625, entre Riaño y Oseja de Sajambre, y la N-621, entre Cistierna y Boca de Huérgano.