La mitad de los pacientes operados ya recibe el alta en el día

S. Calleja/Ical

Más de la mitad de los pacientes que son operados en los hospitales de Sacyl se marchan a casa el mismo día de la cirugía, una práctica que minimiza riesgos de hospitalización como las infecciones, pero que también agiliza la lista de espera y ahorra camas y recursos. De hecho, se estima que si se recurriese a la cirugía con ingreso en los 26 procesos más habituales en los que se aplica esta práctica, incrementaría el gasto en los 80 millones de euros.

En el último año, la cirugía mayor ambulatoria programada superó las 70.000 intervenciones; en concreto, fueron 70.022. Esto implica que representó el 51,04 por ciento de toda la actividad quirúrgica programada que precisa quirófano en la red de hospitales de Sacyl, que cerró la actividad con 137.180 operaciones. Fuentes de Sacyl precisaron a Ical que la actividad total subió a expensas de la cirugía ambulatoria, que crece a un ritmo del uno por ciento desde el arranque de la presente legislatura, al acumular una subida superior al 3,58 por ciento, uno de los objetivos que se marcó este departamento hace ahora cuatro años.

Entonces, la Consejería de Sanidad se comprometió a que siete de cada diez operaciones de una lista 26 procesos se realizaran bajo este modelo, caracterizado por ser un tratamiento quirúrgico multidisciplinario, bajo anestesia, que permite al paciente ser dado de alta a las pocas horas de ser intervenido. Al cierre de 2014, el 70 por ciento de esta lista de cirugías ya se realizó bajo proceso ambulatorio, con mayor éxito en unos procesos que en otros.

Así, por ejemplo, un 93 por ciento de las operaciones para liberar el túnel carpiano se realizaron bajo cirugía mayor ambulatoria; un 98 por ciento sobre el cristalino con o sin vitrectomía, y 99 por ciento de los procesos de esterilización en varones. Además, se logró un 83 por ciento en los procesos intraoculares, sin incluir retina, iris y cristalino.

Los procesos que bajaron la media fueron las extracción de las amígdalas en mayores (con porcentajes de cumplimiento de un 2 por ciento en mayores de 17 años y de siete por ciento, en menores de edad), junto a otros como las intervenciones de hernia en menores (47 por ciento); procedimientos mayores sobre pulgar o articulación (46 por ciento), junto al de ligadura y stripping de venas (60 por ciento).

Actividad global

En global, Sacyl concluyó el año con 267.916 intervenciones, que incluyen las programadas, las urgentes y las que precisan o no quirófano. El groso se concentró en la actividad quirúrgica programada, tanto con ingreso (67.158) como ambulatoria (70.022). Esto obligó a a mantener una media de 153 quirófanos disponibles al mes. Si se comparan los datos con los de 2013, se observa un ligero repunte con 108 cirugías con ingreso más, y 2.781 operaciones ambulatorias a mayores.

De forma paralela, los procedimientos quirúrgicos fuera de quirófano también subieron, un seis por ciento sobre 2013, al ascender hasta los 105.018, frente a los 99.129 de hace un año (5.889 más).En cuanto a las intervenciones urgentes, ascendieron a las 23.084, frente a las 22.882 del ejercicio anterior.

Modelo de futuro

La tendencia registrada en Castilla y León sobre la evolución de la cirugía mayor ambulatoria es un fiel reflejo de lo que está ocurriendo en otros sistemas de salud. Es más, diversos estudios consideran que la cirugía sin ingreso debe ser la norma habitual en el futuro, teniendo en cuenta los menores costes sanitarios, ya que las tasas de sustitución (porcentaje de casos atendidos sin ingreso frente al total de intervenciones) son cada vez más altas.

Recientemente, un estudio publicado en la revista Journal of Orthopaedic Science, que fue realizado por traumatólogos y anestesistas del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, mostró unos resultados “satisfactorios” en cuanto a tasa de complicaciones y reingresos posteriores, con un valor medio de aprobación de los pacientes de 8,55 puntos. Para ello, se estudió a más de 10.000 pacientes que fueron sometidos en los últimos veinte años a diversos procedimientos quirúrgicos ortopédicos sin necesidad de ingreso.

Los resultados obtenidos fueron de tasas más bajas que en otros estudios de cirugía ambulatoria general, hasta el punto de que sólo 14 pacientes requirieron ingreso después de la cirugía, algunos de ellos por vómitos o incomodidad general y cuatro por no tener un adulto a su cargo. Los resultados demuestran que la tasa de complicaciones mayores fue mínima y sin casos mortales, con una mejora significativa en el postoperatorio. Esto implica, según los autores, que es posible proporcionar una cirugía ortopédica ambulatoria de calidad, ya que este tipo de procedimientos se está imponiendo poco a poco en todos los hospitales para el tratamiento quirúrgico programado.

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