La mayoría de los sindicatos rechazan las unidades de gestión clínica por reducir derechos

Ical

La mayoría de los sindicatos sanitarios -UGT, CCOO, Satse, CSI-F, USAE- rechazó hoy el modelo de unidades de gestión clínica que impulsa la Consejería de Sanidad porque asegura que reducirá los derechos de pacientes y profesionales. Las organizaciones denunciaron que su objetivo es reducir el volumen de recursos que se destina a la sanidad, lo que a su juicio perjudicará la calidad asistencial del sistema sanitario en Castilla y León.

Los responsables de las centrales sindicales expresaron su oposición al borrador de decreto que prepara la Consejería de Sanidad que iniciará el proceso de creación de unidades de gestión clínica minutos antes de participar en la reunión de la Mesa Sectorial de Sanidad. Este órgano analiza este proyecto normativo que la Junta ha negociado durante el último año con los sindicatos y que se ha adaptado a la última sentencia que declaró nulas de pleno derecho las unidades de gestión clínica creadas en 2012 en las áreas de Valladolid Este y Zamora.

En ese sentido, la secretaria de Acción Sindical de Satse, Patricia San Martín, censuró la propuesta de Sanidad, que aseguró es un objetivo “político” de la legislatura que se marca como objetivo prioritario el ahorro de recursos humanos y económicos, mediante la reducción del número de profesionales y de camas disponibles. Además, aseguró que los proyectos pilotos de los servicios de Psiquiatría en Zamora y Cardiología en el Hospital Clínico de Valladolid así lo demuestran.

Asimismo, la dirigente de Satse señaló que en estos dos casos ha habido “descontento” por parte de los trabajadores y que el resultado ha sido “negativo”. Explicó que este nuevo modelo supone una división jerárquica ya que señaló que el poder que tenían hasta ahora los gerentes se deriva a los jefes de servicio, que se convertirán en los directores de las unidades. Sostuvo que pautará objetivos al resto de la plantilla, que se concentran en la reducción del presupuesto, un criterio que termina por afectar a la prestación sanitaria y a las condiciones laborales de los profesionales.

Por ello, remarcó que la negociación del borrador en la Mesa Sectorial es un “mero trámite” ya que el texto insiste en la “voluntariedad” y en que se mantendrán los derechos laborales de los profesionales, así como su régimen jurídico, si bien San Martín apostilló que no se han incluido las demandas de los sindicatos, que apuesta por fijar criterios vinculados con la mejora de la asistencia y no economicistas. Ante esta situación, señaló que las organizaciones sindicales abordarán acciones conjuntas contra el modelo de unidades de gestión clínica.

Lesión y agresión

Por su parte, el dirigente de CCOO Jaime Redondo advirtió de que la propuesta de Sanidad lesiona los derechos de los trabajadores y por este motivo se presenta el borrador a la Mesa. Además, denunció que el departamento de Antonio María Sáez Aguado lleva todo el mandato actuando contra los profesionales del sistema sanitario con medidas que persiguen una “merma” de recursos públicos. Todo ello, aseguró, perjudica la atención sanitaria.

También, la representante de UGT, Nieves Martínez, aseguró que el modelo supone una “agresión” contra los pacientes y los trabajadores, ya que supondrá el primer paso de la privatización del sistema sanitario. Señaló que las unidades podrán derivar a otros centros a pacientes que no sean “rentables” para cumplir los objetivos fijados. Finalmente, el secretario de la Unión Sindical de Castilla y León (Uscal), Carlos Areños, sostuvo que supone a su juicio que Sanidad reconoce el “fracaso” de su gestión, que descentraliza en los jefes de servicio para “evadir” responsabilidades. Además, señaló que genera una duplicidad innecesaria de nuevos órganos de gestión.

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