Los hosteleros de León 'pitan' por el “abandono” del sector en la prórroga de los Erte
Los hosteleros leoneses salieron este martes a las calles de la ciudad para protagonizar una caravana de vehículos con la que quisieron revindicar la prórroga de los Erte, ya que “tienen fecha de final a 30 de septiembre, las negociaciones en la mesa están siendo muy complicadas, sin llegar a acuerdos entre sindicatos, patronal y Gobierno”, de manera que se sienten “abandonados”, según apuntó la gerente de la Asociación Hostelería León, Paula Álvarez.
Según los datos aportados por Álvarez, en estos momentos hay 29.000 trabajadores en Erte, de los que un 60 por ciento son del sector servicios, por lo que sino se prorroga su situación “acabarán terminando en despidos y muchos de los establecimientos en concurso de acreedores”.
Unos establecimientos de los que el 80 por ciento tienen un 50 por ciento de la facturación del año pasado, mientras que el 20 por ciento restante está cerrado, aunque “todos ellos tienen que seguir pagando lo mismo: seguros sociales, sueldos, impuestos municipales, alquileres, etc”.
Por ello, Hostelería León propuso la creación de un paquete de medidas en el que, además de la prórroga de los Erte, se incluya mayor exoneración en la cotización a los negocios con apertura parcial y del cien por cien para los que están en cierre total, medidas de apoyo higiénico sanitarias en coordinación con las autoridades sanitarias para la gestión eficaz de puntos de rebrote y el mantenimiento de las cuarentenas y bonificación fiscal en impuestos especiales y tasas municipales.
Asimismo, solicitaron un Plan estratégico de relanzamiento y reconversión sectorial, el apoyo con recursos a fondo perdido a partir de las facturaciones de pérdidas de más de un 25 por ciento.
bonificación fiscal en impuestos y la ampliación de dos años en los periodos de carencia de la financiación, ya que “los créditos ICO han venido muy bien, pero llevamos seis meses sin trabajar y va a haber que pagarlos”.
Finalmente, el paquete de medidas busca bonificación fiscal en costes de arrendamientos y suministros y “seguir el ejemplo de países como Alemania y conseguir el IVA súper reducido, que pase del 19 al siete por ciento de reducción”.